Técnicamente, la verdad es que, en general, los bancos están muy bien y es uno de los sectores más fuertes que veíamos desde comienzos de mayo. El sector está alcista, está claro que beneficiado por el tema de unos tipos de interés más altos por más tiempo.
En el caso concreto de BBVA, es cierto que ha tenido una corrección porque al final el que lanza la oferta de compra suele ser el castigado y el que la recibe el beneficiado. En estos momentos, BBVA está apoyada en los 9,66 euros, que es el nivel que no debería de perder y que se corresponde con los mínimos de la semana pasada. ¿Qué es lo que va a ocurrir a continuación? No lo sé a ciencia cierta, pero lo normal es que, una vez los valores alcistas se apoyan en su zona de media (y BBVA ya lo he hecho varias veces), ese nivel suele ser un buen punto de entrada. Por tanto, 9,66 - 9,70 es un punto interesante para comprar, con un stop ceñidito de 3 o 4 puntos porcentuales, y un objetivo en 11,04 euros. Si la OPA a Banco Sabadell no sale, probablemente BBVA siga subiendo, el mercado lo va a premiar. Pero, en cualquier caso, comprar cerca de la media de 30 semanas, cuando el valor corrige, suele ser buena idea.
Por su parte, Banco Sabadell es el caso contrario. El valor ya se ha distanciado mucho de su media 30 semanas y a lo mejor aquí el mercado ya ha recogido ese precio de la oferta. Si la OPA por parte de BBVA no sale adelante, Sabadell probablemente bajará en bolsa. Por ello, los niveles en los que está Sabadell -está a un 24% de distancia con respecto a esa media 30 semanas- ya son suficientes para salir. Cuando los valores están cerca del 30%, es decir, que ya se han distanciado muchísimo, compensa venderlos porque la probabilidad de que simplemente tengan un retroceso o una reversión a la media es muy alta. Y en el caso de Sabadell estamos cerca de ese entorno. Por lo tanto, quizás deberíamos ir mirando niveles de salida para Sabadell, teniendo en cuenta, por ejemplo, que ese 30% de distancia podría ser bueno.