Schneider Electric es una compañía francesa líder en el negocio de soluciones para la mejora de la eficiencia energética. Sus dos principales segmentos de negocio son la gestión de energía eléctrica, que genera el 77% de sus ingresos y el negocio de automatismos industriales que aporta el 23% restante. Mantiene una amplia diversificación geográfica que va desde el 29% del negocio generado en Norteamérica, otro 29% en Asia (un 14% llega desde China), un 26% de sus ingresos se generan en Europa y un 16% en el resto del mundo.
RESULTADOS E IMPACTO COVID-19
La crisis sanitaria y su impacto en la economía ha forzado la aceleración de la agenda de los principales clientes de Schneider (centros de datos, construcción, industria, ...) en cuanto a sostenibilidad y digitalización, ambas áreas en las que la compañía está claramente enfocada estratégicamente. Schneider ha aprovechado este tirón de la demanda de sus productos acelerando la adopción de paquetes completos de soluciones digitales para atender estas necesidades crecientes. Las prioridades estratégicas de la compañía se centran en más productos, más servicios, más software y mejora en sus negocios sinérgicos.
Las ventas en los nueve primeros meses de 2020 han retrocedido un 6.6% en dato orgánico hasta 18.033 millones de €. Todas las áreas geográficas han registrado contracción en ventas, principalmente Europa -7.8%, seguido de Norteamérica -6.6% y en menor medida Asia -6.2%. Esta última área ya aportaba crecimiento en el 3T20, del +5.1% en ventas.
El segmento de Gestión de energía recuperó de forma importante niveles de ventas en el tercer trimestre consiguiendo crecimiento positivo en todas las regiones, gracias principalmente a la reposición de existencias al final del segundo trimestre y los aumentos de precios.
PREVISIONES AL ALZA
Por segunda vez, ya lo hizo en el 1S20, Schneider ha revisado al alza sus previsiones para el cierre de 2020. Lo ha hecho tras rendir cuentas de los nueve primeros meses, con mayor claridad y más cercanía para el cierre del ejercicio. Ahora las ventas se contraerán en el conjunto del año previsiblemente entre un 5% y un 7% (antes estimaba -7%/-10%). Además, el margen de EBITDA cerrará 2020 entre el 15.1% y el 15.4%. La recuperación vista en ventas y EBITDA principalmente en el tercer trimestre ha favorecido esta revisión al alza de cara al último tramo del año. También muy positiva la evolución de sus negocios en la región Asia, y principalmente en China, en donde la recuperación está siendo mucho más notable, rápida y estable, a la vista del crecimiento del 14% en ingresos en el tercer trimestre.
VALORACIÓN FUNDAMENTAL
Schneider participa en un sector que sin duda se está situando como imprescindible en la recuperación económica. Los diferentes organismos públicos, tanto nacionales como supranacionales quieren hacer pivotar la recuperación de las economías sobre la transición energética y tecnológica, dos áreas en las que Schneider centra su estrategia. El apoyo público en cuanto a financiación y regulación será un catalizador para las compañías centradas en la transición energética y Schneider sin duda es una de ellas. Esto unido, además, al creciente interés de los fondos que invierten en energía verde.
Con una gestión muy adecuada de su crecimiento, Schneider crea valor tanto orgánicamente como inorgánicamente. Está consiguiendo centrarse en sus actividades más rentables y tiene también una muy adecuada diversificación geográfica.
Ya se ha visto en sus cifras correspondientes al tercer trimestre que una mínima recuperación del panorama económico y empresarial en general impacta muy positivamente en su negocio, por lo que la llegada de la vacuna y la superación de la pandemia, confiamos en que más pronto que tarde, favorecerá el impulso y crecimiento del negocio de Schneider.
En una valoración por múltiplos y bajo previsión para el cierre de 2021 BPA de 4,84€/acción, hay margen entre valor y precio. El mercado descuenta un PER de 24,2v, en línea con su media histórica, pero con descuento si ajustamos el PER con el CBA estimado, con resultado de PEG inferior a la unidad recogiendo la infravaloración de la compañía por crecimiento de resultados. Ratios de solvencia en niveles muy robustos y rentabilidades elevadas. ROE, rentabilidad sobre patrimonio neto ronda el 11.5%, y sobre cifra de negocio (RCN) supera el 10%. Schneider es además una compañía que tradicionalmente ha sabido retribuir al accionista con dividendos elevados y estables.
En base a una valoración fundamental la recomendación es positiva con horizonte temporal medio/largo plazo.