El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reunirá mañana con los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, y los presidentes de CEOE y Cepyme, Antonio Garamendi y Gerardo Cuerva, respectivamente, para instarles a alcanzar un "gran pacto de rentas" con el que evitar una espiral inflacionaria que mine el poder de compra de las familias y ponga en riesgo la recuperación económica.

Según fuentes sindicales, la cita se celebrará en el Palacio de La Moncloa a las 11.00 horas y a ella asistirán varios ministros, entre ellos la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

Mediante esta reunión, el Ejecutivo pretende facilitar e impulsar el encuentro entre los agentes sociales para que aborden varios temas fundamentales: la evolución de salarios, de los beneficios y de los dividendos empresariales y las medidas de apoyo a los colectivos vulnerables, según detalló hace unos días la vicepresidenta Calviño.

Junto al pacto de rentas, en esta cita en Moncloa se abordará también cómo marcha el Plan de Recuperación desplegado por el Gobierno español para sortear los efectos de la crisis originada por el Covid e impulsar el crecimiento económico.

El pasado miércoles Sánchez anunció en el Congreso que impulsará un 'Plan Nacional' de respuesta al impacto económico de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, en el que incluyó un "gran acuerdo" de rentas con los agentes sociales.

En concreto, el presidente "invitó" a sindicatos y empresarios a lograr un pacto que proporcione "estabilidad y confianza", tanto desde la perspectiva de los costes salariales, como desde la moderación de los márgenes y beneficios de las empresas, con el objetivo de evitar caer en una espiral inflacionaria que reduzca el poder adquisitivo de las familias y ponga en peligro la recuperación.

Antes de que se produjera esta intervención de Sánchez, los agentes sociales llevaban ya unas semanas manteniendo contactos bilaterales de cara a la consecución de un nuevo acuerdo interconfederal por el empleo y la negociación colectiva (AENC), del que formaría parte lo que el presidente denominó pacto de rentas.

Los agentes sociales no lo llaman así porque dicho acuerdo bilateral, que ha sido suscrito hasta ahora en cuatro ocasiones, incluye más materias que las estrictamente retributivas. Se trata, en definitiva, de una guía de recomendaciones de carácter plurianual que CCOO, UGT, CEOE y Cepyme elaboran para orientar a sus representantes en las negociaciones de los convenios colectivos.

Justo al día siguiente de las palabras de Sánchez, el pasado jueves, sindicatos y empresarios iniciaron formalmente la negociación del V AENC. La reunión entre ambas partes sirvió para intercambiar impresiones y hablar de las materias, no sólo salariales, que deberían incluirse en el acuerdo.

Tras esta primera reunión técnica, CCOO, UGT, CEOE y Cepyme se emplazaron a un nuevo encuentro el próximo miércoles, día 9, para ir concretando sus propuestas y el redactado del posible acuerdo.

LOS SALARIOS, EL PUNTO "MÁS CONFLICTIVO"

El tema más conflictivo en esta negociación es el relacionado con los incrementos salariales. Los agentes sociales no entraron en este primer encuentro en cifras y porcentajes, pero se comprometieron a llevar a la reunión del próximo miércoles "algo más concreto" sobre el tema salarial.

UGT llegó a proponer en su día una subida del 5% ante la escalada de la inflación, mientras que CCOO se ha mostrado partidaria en alguna ocasión de atender a la inflación subyacente, que ronda el 3%. En todo caso, ambos sindicatos quieren asegurarse de que los trabajadores no sufran pérdidas de poder adquisitivo, de ahí la importancia que dan a las cláusulas de revisión salarial.

El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, no ve "razonable" una cifra del orden del 5% y ha apostado por hacer un ejercicio de "contención y moderación" de los salarios ante la elevada tasa de inflación y el impacto que puede tener la guerra en Ucrania sobre la economía española.

Garamendi no ha dado cifras, pero considera que la negociación con los sindicatos "debería estar cerrada antes del 31 de marzo, con acuerdo o sin él".

El último acuerdo de convenios que alcanzaron las partes estuvo vigente de 2018 a 2020, y para su último año planteaba subidas salariales del entorno del 2% más un punto porcentual ligado a conceptos como la productividad, los resultados empresariales y el absentismo laboral.

De acuerdo con los últimos datos del Ministerio de Trabajo, los salarios pactados en convenio subieron de media un 2,01% el pasado mes de enero, por encima de lo registrado en 2021 (+1,47%), pero lejos del IPC.