GUPC dice que la actitud del administrador de ACP, Jorge Quijano, es “injustificadamente rígida” y añade que le ha reiterado la importancia de recibir el pago de 50 millones de dólares de ACP por una factura pendiente discutida en las últimas reuniones para permitir los pagos a las subcontratistas y a los trabajadores y cubrir así las nóminas de esta semana. “Si bien no ha habido respuesta, GUPC sigue buscando una solución integral”.
“Las empresas que componen GUPC son empresas de construcción, no bancos. Es injusto e imposible para ACP y Panamá esperar que las empresas privadas financien por sí mismas 1,6 billones de dólares en costos en un proyecto que debería ser financiado en su totalidad por la ACP. Además, el derecho panameño aplicable destaca que debe existir un equilibrio y un balance razonable en el contrato. Sin una ACP que se una a GUPC para llegar a una solución, los fondos no estarán disponibles para pagar a los trabajadores panameños, subcontratistas y proveedores. Aún peor, los amplios beneficios económicos de la expansión del Canal de Panamá no estarán disponibles para el pueblo panameño por años, lo que supondría unos mayores costos”, añade la nota.
La decisión de ACP de romper las negociaciones tiene una serie de ramificaciones inmediatas, que GUPC recoge en la nota de prensa:
- Riesgos inmediatos de pérdida de empleo que afectan a 10.000 trabajadores y sus familias;
- Incapacidad inmediata por parte de GUPC de pagar numerosos subcontratistas de Panamá y otros países;
- Los retrasos en la finalización de las obras de expansión del Canal de Panamá y el retraso en la realización de los miles de millones de dólares de ingresos y oportunidades de crecimiento económico que la expansión le puede generar a Panamá - de acuerdo con informes públicos, la aseguradora Zurich ha estimado que el proyecto se retrasará entre 3 - 5 años si no hay un acuerdo;
- Los años de litigios y arbitraje en las jurisdicciones de todo el mundo dejará una sombra continua sobre ACP y el Canal de Panamá;
- Los impactos sobre los puertos y las empresas de toda América y el mundo que han realizado inversiones y planes en base al proyecto de expansión;
- El fracaso de un proyecto estratégico para la economía de Panamá y el mundo dejará una sombra permanente sobre el proyecto de expansión del Canal de Panamá en los libros de historia.
PLAN B
Tras este fracaso, cabe preguntarse si la ACP acudirá al “plan B” que parece que tiene en mente. Según podíamos leer esta semana, Jorge Quijano se reunió el viernes con el embajador de Estados Unidos en el país para buscar una alternativa. Ésta pasaría por la americana Bechtel, la constructora que quedó segunda en la puja por ganar las obras de la ampliación al estimar el proyecto en 1.000 millones de dólares más que Sacyr y sus socios.
En estos momentos Sacyr se deja un 5,60%, hasta los 3,6550 euros.
N.A.