Desde que el pasado mes de agosto saltasen todas las alarmas tras detectarse una posible contaminación de varias dosis de la vacuna de Moderna producidas por Laboratorios Rovi en Japón, la farmacéutica no había vuelto a ser capaz de alzar el valor de sus títulos más allá de los 60 euros por acción.
Antes de que tuviese lugar el desafortunado suceso, los títulos de Rovi alcanzaron máximos históricos en los 67,900 euros por acción. Sin embargo, tras lo ocurrido el precio de la acción comenzó a descender hasta llegar a los 50,600 euros el 30 de agosto. Fue justo ahí cuando Rovi tocó fondo y tras aclarase la situación de la producción de las dosis de la vacuna de Moderna contra la Covid, el mercado volvió a depositar su confianza en esta farmacéutica.
Si bien es cierto que desde entonces, los títulos de Rovi volvieron a la senda de crecimiento y que, jornada tras jornada, mejoraban su valoración, no había sido suficiente, hasta ahora, para retomar la cota de los 60 euros con los que cerraba la jornada de ayer.
Asimismo y siguiendo esta tendencia, Rovi cambia de ciclo y pasa de consolidación a fase alcista. Así, los indicadores técnicos de bolsa le otorgan una puntuación total de 8 sobre los 10 puntos posibles, sumando tres más a su anterior valoración.
Destacan en positivo la tendencia a largo y medio plazo, el momento total y el volumen creciente a largo plazo. Menos favorable, el volumen decreciente a medio plazo y el rango de amplitud creciente.