Repsol es la empresa energética del Ibex 35 que cotiza con unos múltiplos de valoración más atractivos: PER (precio sobre beneficios) de 8,25x y P/VC (precio sobre valor contable) de 0,7x. El entorno actual, la vertical subida del precio del petróleo que roza los 90 USD/barril, permite que la empresa puede cumplir y acelerar su plan estratégico de crecimiento apoyado en energías verdes. Todo ello con un balance saneado que permite mantener una alta rentabilidad por dividendo: ronda el 5,75% para este año. Por todo ello recibe valoración positiva por fundamentales (ver “Análisis fundamental sector energía en Ibex 35”).
Los indicadores técnicos de la zona premium conceden a la acción de Repsol una puntuación alta: 8,0 puntos sobre un máximo de 10 disponibles. El algoritmo está programado para detectar y seguir tendencia alcista de fondo y una puntuación igual o superior a 7,5 puntos es compatible con una fase alcista que implica que la mayoría de los patrones analizados (tendencia, momento, volumen y volatilidad) favorecen que el precio continúe subiendo.
Repsol en gráfico diario con Rango de amplitud en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
El precio rebota con contundencia después de apoyarse en las medias móviles simples de medio y largo plazo que continúan cruzadas al alza y adquieren pendiente positiva. La volatilidad está bajo control, el volumen de contratación repunta y no existe sobreventa. La combinación favorece que el precio continúe escalando posiciones y nos decantamos por una ruptura del máximo reciente y resistencia establecido en 11,462. Los stops más ajustados quedarían por debajo 10,256 que es soporte intermedio. Si se confirma la ruptura de máximos, el precio quedaría sin resistencia significativa hasta 13,114, y merecería la pena enfocar la posición desde un punto de vista tendencial ajustando stops al alza de forma gradual.