Se esperaba que las cuentas de Repsol fueran positivas, ya que estamos hablando de un nivel de precios que es elevado y que beneficia a compañías del sector. Repsol ha presentado unas cuentas en las que ha duplicado el beneficio neto, pero es que además se sitúan ya muy por encima del nivel que había antes de la pandemia; en el año 2019 ganó 1.133 que comparan con los 2.539 de este semestre, y si miramos el beneficio neto ajustado es un resultado que ha más que triplicado el que había un año antes.
Lo que ha pasado en las cuentas de Repsol es que hemos visto una provisión de 1.800 millones de euros que la compañía ha tenido que dotar para a hacer frente a ciertos golpes regulatorios -algunos ya se han producido como el impuesto que anunciaba el Gobierno español- y otras incertidumbres.
Pero en general, pensamos que las cuentas son positivas. El reto viene a partir de ahora.
Otra cosa que ha gustado en las cuentas de Repsol es el nivel de inventarios que ha tenido la compañía y que refuerzan el posicionamiento de Repsol para garantizar el suministro de cara a las próximos meses en un contexto que se presenta bastante complicado.