Desde que empezó la pandemia los gobiernos y los bancos centrales han puesto en marcha políticas expansivas de inversión frente a la austeridad que marcó la crisis financiera de 2008. La pandemia ha supuesto un cambio de mentalidad en la agenda de los organismo gubernamentales con el objetivo de reactivar las economías. Lo que no sabemos es hasta cuando pueden durar estos estímulos y si la austeridad podría volver cuando pase todo esto.
Ahmed apunta que gracias a estas políticas hemos visto un importante rebote en las bolsas y también la importancia que han tenido estos estímulos, a veces a través de ayudas directas en EEUU o Reino Unido, para los ciudadanos. Desde Fidelity están convencidos que la austeridad no volverá al menos hasta que no sea vea un crecimiento sostenible en los países desarrollados.
Al mismo tiempo sostienen que los bancos centrales seguirán teniendo mucho protagonismo en la economía global y los mercados de acciones y de renta fija. Fidelity apunta que los tipos de interés seguirán en negativo y no se verá un gran cambio en 2021 respecto a 2020 en este aspecto. Para los mercados todas las noticias positivas sobre la vacuna tendrán impacto; la vacunación supone la salida a la crisis del Covid-19.
El responsable macro de Fidelity comenta que, a pesar de todo, las valoraciones son elevadas frente a su media histórica, aunque si se compara las valoraciones de la renta variable con otros activos como la renta fija el retorno no tiene ningún tipo de comparación, por lo que las bolsas están baratas frente a otros activos comparables. Entre el universo de inversión de la renta variable hay mucha dispersión entre aquellas compañías más expuestas a la pandemia y las que no, por lo que desde Fidelity creen que este 2021 va a dar oportunidades en las compañías más ligadas al ciclo que han sido las más castigadas el pasado año.
En cuanto a la diversificación que debería llevar a cabo un inversor medio este 2021 desde la gestora estadounidense apuntan que la pandemia ha puesto de manifiesto la debilidad de la renta fija como un activo diversificador. "Se comporta como un pasivo y no como un activo, sobre todo los bonos europeos y japoneses", subraya Ahmed. Fidelity defiende que una cartera diversificada no debería dejar la oportunidad de contar con activos alternativos como la deuda no cotizada o el capital riesgo con el fin de conseguir una combinación idónea de seguridad, liquidez y rentabilidad.