¿Qué os impulsó a emprender este negocio de comida a domicilio?
María. estaba terminando la universidad y nada nos ataba, ni hipotecas ni hijos, yo en ese momento estaba en la universidad buscando trabajo y Alfonso llevaba algo más de un año trabajando en un restaurante en Madrid. Queríamos emprender pero nos considerábamos muy jóvenes y sin experiencia. Varios conocidos nos dijeron que era el momento y empezamos a buscar de dónde podíamos sacar el dinero para poder emprender y allí fuimos. Nuestro sueño era tener un restaurante pero nos recomendaron empezar por comida delivery para tantear si la comida gustaba a la gente. Y por ahora está funcionando bien. 

¿Cómo nace Red Panda?
Alfonso. El proyecto en el fondo nace de que yo estudié dirección de hotel,  toqué parte de cocina y siempre me ha gustado mucho la cocina asiática, sobre todo del sudeste asiático. En la Universidad siempre que había clases de cocina le pedía al profesor hacer platos de curry o pastas de curry del sudeste asiático y vimos el hueco dentro del mercado que no estaba  cubierto o lo estaba pero con un producto de calidad y hecho al momento como lo hacemos nosotros. 

María. Aparte empieza porque nosotros, que somos creyentes de la comida a domicilio, yo que no puedo comer gluten tenía pocas opciones que fuesen de calidad. Pensamos que si hacíamos comida de calidad, sin gluten y sin lactosa con un sabor muy buena, podríamos hacer realidad nuestra idea. 

Os especializáis en la gastronomía de fusión asiática, sobre todo en currys tailandeses, ¿qué os diferencia de la competencia?
María. La principal diferencia fue que yo estudié diseño de moda y me encanta la parte de gastronomía porque vengo de familia de hosteleros. La diferencia es la idea creativa, tanto en cocina como en packaging. Además, la cercanía que tenemos con nuestro cliente porque hemos conseguido una comunidad muy bonita en redes sociales que hace que conozcamos a nuestros clientes y sus preferencias.  

Alfonso. Aparte de poder pedir por la aplicación, siempre estamos pendientes del teléfono y ningún delivery hace eso. 

María. Siempre estamos pendientes de nuestros clientes, algo que  se podrá hacer ahora pero en el futuro se podrá hacer de otra manera pero esa conexión con el cliente es algo que nos diferencia mucho.  

¿Qué tipo de cliente accede a vuestro servicio?
Alfonso. Exactamente no les ponemos cara porque no sabemos si tiene 17 o 70 años pero entendemos que es cliente de un rango de entre 24-45 años que es gente activa en redes sociales. 

María. Y gente que le gusta la gastronomía y nueva experiencias sin miedo a probar determinadas cosas aunque sean diferentes. Ahora  estamos descubriendo mucho a nuestro cliente porque le vemos a través de redes sociales. 

Actualmente Red Panda está disponible a través de plataformas de comida a domicilio y de vuestra web, ¿tenéis pensado en un futuro abrir un espacio físico?** ¿Y contempláis expandir Red Panda a otras comunidades?
Alfonso. Estamos buscando locales desde hace seis meses y sería nuestra idea abrir un local con una barra para que coman 10 personas con una cocina abierta y dar un servicio especializado y centralizado en el cliente.  Y lo de otras comunidades, bastante nos está costando arrancar aquí, es una esfuerzo económico bastante grande y de momento no. 

¿Cómo definiríais la experiencia que ofrece Red Panda?
María. La experiencia es algo que siempre la pensamos y luego nos equivocamos porque nunca vemos qué hay detrás de un pedido desde que lo pedimos hasta que llega a casa hace que sea un delivery que no es al uso.  ES una experiencia totalmente diferente basada en la experiencia con amigos y familia. 

¿Cómo de fácil es emprender en este país? 

María. El emprendimiento es duro. Nosotros cuando llamábamos a alguna situación o ayuntamiento siempre nos han ayudado por lo que si tuviera que mandar un mensaje a alguien que quiera emprender con nuestra edad sería que lo haga. 
Alfonso. Es complicado ser joven porque muchas veces te miran por encima del hombro y eso es lo más difícil.