La semana pasada asistimos a un movimiento de desafío bajista conocido como “Bear Trap”, como tuve la oportunidad de explicar en mi último artículo en esta casa. Finalmente, mi idea de farol de mercado fue correcta y el mercado nos permitió entrar a la contra. Eso es lo bueno que a veces tiene el mercado, poder buscar la contra, puesto que aparte de optimizar las entradas, permite una descarga de adrenalina, que únicamente podemos experimentar en dichos mercados. Llevo toda la semana pensando en una idea que me apetece mucho compartir con todos ustedes. Durante mi jornada de Trading, son muchas las personas que me preguntan al respecto y que mejor que mi tribuna de opinión, para explicar de manera abierta mi forma de comprender el mercado.
Debemos entender bien la teoría de Dow y comprender que el mercado se mueve formando tendencias. La tendencia primaria es aquella que se relaciona con el ciclo económico. Charles Dow inventó el chartismo con esta teoría pensando básicamente en economía, porque la bolsa es un indicador adelantado de la misma. Podemos tratar de estudiar el chartismo de diferentes maneras, pero si no comprendemos la estructura de mercado a largo plazo, es complejo operarlo a corto. ¡Esa es mi experiencia! No podemos engañarnos y caer en el error de buscar pautas chartistas en el corto plazo. La operativa intradiaria es muy compleja, puesto que los patrones que tan bien funcionan en el largo plazo, están sujetos a muchas complicaciones a corto y es lógico, la premisa está pensada para encontrar zonas de acumulación y distribución y éstas se forman en perspectivas más amplias. Es cierto que los mercados cotizan en fractales, pero no podemos negar, que las únicas referencias fiables, son aquellas que dominan escalas temporales más amplias. En este sentido, los soportes, resistencias y líneas de tendencia de largo plazo, son igualmente aplicables en el corto plazo, básicamente porque una resistencia en un gráfico semanal, en algún momento lo será en un gráfico de 1 minuto. El largo plazo absorbe los marcos temporales más cortos, por este motivo, podría decir que en el Trading lo importante es buscar puntos de apoyo clave, para lanzar la operativa y aplicar el plan de Trading en el corto plazo. Lógicamente, la operativa en el corto plazo está sujeta a más errores, luego más frustraciones. A más frustraciones, más pérdidas, por lo que se concluye que la política de gestión monetaria debe ser menos ambiciosa en el corto plazo, puesto que estamos sujetos a un mayor número de errores y por este motivo y no por otro, es tan complejo el Day Trading. El ego es un enemigo duro de roer y si no comprendemos bien en qué consiste el mercado difícilmente tendremos éxito en el corto plazo.
Entonces, siguiendo la pauta de la teoría de Dow, con origen en 1.908, podemos decir que una tendencia primaria es una sucesión de máximos y mínimos crecientes o decrecientes, compuesta por pautas impulsivas y correctivas secundarias. Las pautas impulsivas siempre cotizan en dirección de la tendencia primaria y las correctivas, en contra. Las pautas correctivas retroceden un tercio, la mitad o dos tercios, el movimiento direccional previo, por este motivo, cuando las pautas correctivas retroceden un tercio, nos indica que el mercado está fuerte y que por lo tanto el impulso posterior será importante. La temporalidad de las tendencias secundarias suele alargarse entre uno y tres meses, siendo habitual impulsos más breves que las correcciones que a veces forman zonas laterales.
Actualmente sabemos que la tendencia primaria del selectivo español es alcista y que el último máximo se sitúa en los 10.063 puntos. La pauta correctiva del IBEX 35 se ha formado con un patrón de bandera, y ha durado poco más de un mes, período que ha corregido al mercado un tercio de la subida precedente. Tras la trampa bajista de la semana pasada, el mercado ha girado y como me temía, ha roto el rango lateral. ¡Hemos cazado al oso! y ahora estamos en posición de buscar un nuevo arranque, ¡buen trabajo! Ahora, como siempre mantengo; ¡anticipación y convicción! No podemos pretender que una corrección se complete tras dos días de caídas, del mismo modo que no podemos pretender que un impulso se desarrolle con una semana de subidas. El objetivo es superar el máximo relativo anterior y si ello sucede, entonces veremos el verdadero momento alcista y tal vez, el tan deseado rally de navidad.
Pero no hay tiempo ninguno para lamentos, la operativa exige desgaste y las dudas alimentan el miedo. Tenemos miedo a perder y a la vez a quedarnos fuera. Observamos el desarrollo de la tendencia, pensando que es una ruptura falsa. Posteriormente, nos planteamos si veremos un Pull Back y finalmente decidimos retrasar la entrada en el Break Out del máximo anterior, es decir; los 10.063 puntos. Y por supuesto, observando un doble techo en el momento de superación de dicho nivel. Pero el mercado se desarrolla marcando nuevos máximos y alimentando su velocidad con nuevos incautos que van entrando de forma impulsiva en el momento que es más fácil hacerlo, ¡cuando sube! y el saber popular alardea de las jugosas plusvalías, justo antes de hacer un nuevo techo.
Hay que posicionarse durante el desarrollo de la pauta correctiva, para poder liquidar las ganancias en la fase de exaltación de la pauta impulsiva. Hay que apartar el miedo a un lado y centrarse en hacer cartera, puesto que si el mercado arranca como parece, lo que no hagamos ahora, ¡ya no lo podremos hacer después! y no olvide que una pauta dura entre uno y tres meses.
Finalmente, la amplitud del mercado nos anima a comprender si la ruptura del mismo es lícita o no y si el posible Break Out de la pauta correctiva es real o falsa. Los gráficos que adjunto no dejan lugar a dudas, el mercado en su conjunto está preparando la fuga, eso me invita a pensar que como mínimo lo va a intentar, así que ha llegado la hora de ir posicionándose poco a poco, haciendo un correcto Stock Picking y añadir nuevas posiciones, a medida que podamos cubrir con Stop Break Even las tendencias que nos permita el mercado.
No podemos olvidar que un Trader vive un sueño, pero no vive de sueños, puesto que soñar es gratis, pero hacerlos realidad requiere determinación y mucho sacrificio y no es lo mismo decir que se está dispuesto a sufrir, ¡que hacerlo! Pues al fin y al cabo el fracaso suele ser la antesala del éxito y la mediocridad suele imponerse en nuestra sociedad, a veces falta de valor y sacrificio. Pero el mercado, afortunadamente no se acomoda y devora sin piedad dicha mediocridad, premiando siempre la excelencia. ¡Seamos excelentes entonces!
Gisela Turazzini
CEO | BLACKBIRD