En opinión de Irwin Kellner, colaborador de MarketWatch, hay varias razones que explican la desaceleración económica actual de Estados Unidos.

“La primavera ha llegado, pero la economía sigue congelada”, afirma Kellner. En su opinión, el duro invierno está pasando una gran factura a la recuperación, ya que ha afectado al consumo privado. La factura energética de los hogares ha reducido el poder de compra de las familias.

Además, el precio de los alimentos también ha subido a su ritmo más elevado en los últimos tres años. Por otro lado, el sentimiento de los consumidores se ha visto afectado tanto por el mal tiempo como por la debilidad del mercado laboral en los últimos meses.

Este experto afirma que el mercado laboral sigue sin mostrar una recuperación total, sobre todo en lo que se refiere al desempleo de larga duración. Por otro lado, tras una recuperación en 2013, el mercado inmobiliario también está mostrando señales de desaceleración, no sólo por el mal tiempo sino por la subida de los tipos de interés hipotecarios.

Por último, la Reserva Federal está recortando su programa de compra de activos, al mismo tiempo que el Gobierno continúa con su consolidación fiscal.

C.P.O.