Para aplicar la estrategia del Swing Trading se puede usar cualquier producto financiero. Es decir, futuros, ETFs, acciones, CFDs o materias primas
Ejemplificación gráfica del Swing Trading
Lo primero que se debe hacer para seguir esta estrategia de inversión es observar el activo en el que se desea entrar y su gráfico para a continuación verificar su tendencia. Es decir, si es alcista o bajista. Acto seguido se realiza el cálculo del stop loss, preferiblemente si es dinámico, y luego se compara la posición alcista o bajista.
En la hipótesis de haber abierto posiciones al alza, los niveles de Stop Loss (el precio de cierre de la posición) serán inferiores que al último cierre. O lo que es lo mismo, el stop loss se encontrará por debajo a los niveles en los cerró el activo en la jornada anterior. Así pues, si en posteriores sesiones la cotización desciende, el stop loss saltaría y automáticamente se cerraría la posición.
En resumidas cuentas, con esta técnica se está siempre dentro del mercado y aprovechándose de sus movimientos tanto al alza como a la baja. En función de cómo se desarrolle la tendencia y como vaya realizando el gráfico un dibujo concreto, los stop loss que pongamos nos situarán en posiciones cortas (bajistas) unas veces y otras en largos (alcistas).
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