José Luis Cava señala que la economía de China es frágil y se está debilitando. “El Financial Times publica que el Partido Comunista Chino, en su tercer pleno, va a estudiar la inversión en tecnología de vanguardia”. ¿Por qué están haciendo esto? “Porque el Partido Comunista Chino sabe que exportando productos de bajo valor añadido no va a conseguir incrementar la renta disponible ni va a conseguir incrementar el PIB. Entonces lo que quiere hacer es exportar productos de alta tecnología y de alto valor añadido”.
El experto señala que hasta ahora la economía china se ha basado fundamentalmente en la compra de unos productos, transformarlos y exportarlos, añadiendo en el proceso muy poco valor añadido, del orden del 5%. “Hasta ahora han podido adquirir la tecnología robando la propiedad intelectual, pero ahora, cuando uno quiere fabricar productos de alta tecnología, tienes que invertir dinero”. El problema, según el analista, es que han desperdiciado mucho dinero. Además, tiene una competencia “feroz” en esta materia, como Taiwán, Corea del Sur, Japón o incluso Singapur.
Otro problema es la evolución del yuan chino con respecto al dólar, que está en una “gran tendencia bajista”, lo que para el experto significa que no va a atraer inversión extranjera. Y además, la rentabilidad del bono chino está también en tendencia bajista, “nos encontramos que China, no solamente no va a registrar inversión extranjera, sino que muchos de los capitales chinos van a salir al exterior para protegerse de la devaluación de su moneda. Por lo tanto nos encontramos que la inversión en tecnología va a depender únicamente de los recursos que tenga el Partido Comunista Chino”.
A esto se le suma que China se está embarcando en guerras comerciales. “Hasta ahora, a la Unión Europea la tiene amansada. La UE, gracias a la presión de los lobbies chinos, no le incrementa los aranceles a China. Pero tarde o temprano esta situación se va a corregir. Si Trump llega como presidente a Estados Unidos, obviamente va a incrementar los aranceles a China”, lo que supondrá que la exportación de sus productos tradicionales se va a frenar, y por lo tanto vamos a asistir a un crecimiento más lento de la economía china.
A nivel global, al estar los destinatarios principales de los productos chinos en Europa y Estados Unidos, “lo más probable es que la actividad económica también en estos países se ralentice. Y podría aumentar el riesgo de una recesión global”.
En cuanto al S&P 500, Cava señala que subió con fuerza en la sesión de ayer y la tendencia sigue siendo alcista a corto plazo. “Yo ahora mismo lo que voy a hacer es que mientras se mantenga por encima de 5.580, voy a mantener una predisposición alcista y voy a considerar como objetivo más probable que intente dirigirse a la zona del 5.700”.