Esta semana que comenzamos tenemos que estar pendientes del PMI manufacturero de junio, que parece que va a pasar de 56,4% al 56,5% y también habrá algunos datos interesantes sobre la vivienda que nos hace ver un poco cómo está la economía. Además, Jerome Powell va a hablar el miércoles y estamos pendientes de sus palabras ya que la semana pasada subían 0,25 puntos los tipos de interés.
Exacto, tuvimos una subida de tasas muy anticipada pero los comentarios de Jerome Powell posteriores fueron muy optimistas con el ritmo de la economía y le sigue sorprendiendo que no haya inflación de empleo.
Esta semana tenemos los números del PMI y también de déficit comercial, pero la semana pasada tuvimos números de ventas minoristas que fueron el doble de lo esperado muchos economistas ya están hablando de un PIB del segundo trimestre de más del 4%, lo que conllevará a otro aumento adicional de tasas. Hay una aceleración de crecimiento que ya se nota bastante en la economía de Estados Unidos.
También conocimos el dato de la inflación que subió a máximos de 6 años por el dato del IPC que subió dos décimas en mayo hasta una tasa interanual de 2,8%.
El mercado lo ignoró un poco, no sé muy bien por qué ya que fue el número más alto en seis años, después salió la inflación mayorista que también acusó un poco de subida y el mercado no lo miró con tanta atención como los niveles de actividad económica que sí están muy fuertes.
El mercado también reaccionó el viernes cuando Donald Trump impuso unos aranceles a China de 50.000 millones de dólares
Y China contestó esa misma tarde con otros 50.000 para los productos americanos. La verdad es que hay un poco de fatiga con el tema de la guerra comercial porque es como el cuento del lobo, un juego de amenazas que hasta que no aparezca las sanciones nadie sabe lo que pasará. Las de aluminio y acero se impusieron al final pero económicamente tienen tan poco significado que al final no tienen mucho rigor. Hay que ver, claramente al mercado no le gusta que se suba el tono y la retórica, así que hay que ver cómo sigue esta ecuación pero en teoría las sanciones entran en vigencia el 7 u 8 de junio, por lo tanto todavía hay tiempo para una solución de último minuto.
Trump parece muy amigo del presidente chino y del de Corea, y además habló mal de la OPEP
Se viene metiendo bastante con el tema de la OPEP. Como sabes comienzan las vacaciones en el hemisferio norte, que es la estación donde más se consume combustible y Trump dijo “un petróleo de 100 dólares no me gusta para nada”, hay mucho rumor de que habría llamado a la gente de Arabia Saudita para pedirle algún aumento de producción, esta semana tenemos una importante reunión de la OPEP donde Arabia Saudita y Rusia – que de paso jugaron el partido de apertura del mundial- acordaron empujar un aumento de la cuota. Iraq, Irán, Nigeria y Venezuela se oponen a este aumento y los observadores creen que finalmente va a producirse, por eso el petróleo ha tenido una caída de más del 5% o 6% y, por consiguiente, las compañías energéticas en las últimas semanas.
El petróleo que no para, que sube que baja… hace unas semanas se veía datos de 80/100 dólares.
Exactamente, pero Trump no se cansa de hablar, se ve que llamó a algunos amigos incluso el presidente Putin dijo que en Rusia con un petróleo de 60 dólares estamos muy bien y eso mando la señal de que probablemente por ahí van a ir los tiros.
Las compañías de comunicación, que si una compra a otra, que si se fusionan, que si hacen contraoferta… ¿Cree que podría haber monopolio?
Yo creo que esto acaba de empezar, la patada inicial la dio que el juez general aprobó la compra de TNT la compañía de teléfono, cable y demás o como digamos transmisión, la compra de Warner que es un gran conglomerado de contenido audiovisual del mundo. Recordemos esta es una decisión a la que Trump se opuso, Warner también es dueña de CNN que siempre se pelea con el presidente y, a partir de esto, se desencadena que Comcast hace una oferta por comprar 21 Century Fox que era una cosa que Disney ya estaba por comprar.
Lo que está pasando es que todas las compañías que nos dan la llegada al internet, al contenido, la que nos da el cable, el teléfono, la que en su momento nos daba el teléfono de línea se dan cuenta de que se están convirtiendo en meros trasmisores y los que se llevan el dinero son los que generan el contenido. El mayor generador de contenido el mundo en este momento es Netflix, que hace la serie y te la entrega en directo donde quieras, sale la serie completa sin tener que esperar y en el medio está toda la cadena de producción tradicional, lo que está pasando es que se están dando cuenta de que el valor está en el que genera el contenido y las compañías que transmiten se dan cuenta que lo están perdiendo.
El gran temor a parte de todas estas funciones es que los mega grandes todavía no entraron, Microsoft, Apple, Facebook… que pasa si de repente Apple decide comprar Netflix o Microsoft compra Disney, y eso es lo que está generando mucho ruido porque se darán cuenta de que la creación de ese contenido es lo que hoy tiene mucho valor.
Hay mucho dinero de por medio, ¿Cree que puede afectar al mercado?
Exactamente y como este juez federal reguló que no es monopolística esta operación por ahora nadie está objetando ese tema, que como siempre pueden intervenir en cualquier momento el regulador europeo o el departamento de justicia de Estados Unidos, pero con esta luz verde del juez el marte es como que fue la patada inicial de lo que probablemente sea una colección importante de fusiones entre grandes generadores de contenido y quienes lo transmiten.
¿Cómo está la situación en los mercados emergentes latinoamericanos y sobre todo en Argentina?
La subida de tasas en Estados Unidos, el fin de los programas de compra de bonos anunciada por el BCE ha producido una retirada de esa marea de liquidez que de alguna manera bañó los mercados emergentes. Ese dinero se fue, hoy la tasa es 2% en Estados Unidos, el dinero nos rinde 0, el BCE dijo que el año que viene probablemente suban las tasas y todo esto ha generado una enorme conmoción en mercados emergentes. El eslabón más frágil fue Argentina, que la semana pasada finalmente puede que tenga una caída abrupta de más del 20% en semanas y le costó la cabeza al presidente del banco central que fue remplazado después de haber ido a pedir al presidente del FMI y de recibirlo, pero aun así no ha podido calmar los mercados. Esto ha seguido en Brasil, Turquía, Filipinas… no es un fenómeno aislado como se pensó al principio sino que parece más endémico incluso Cristine Lagarde del fondo monetario expresó cierta preocupación por el ruido en los mercados emergentes que parece que tienen más problemas.