Está previsto que el próximo miércoles Powell comparezca ante el Congreso de los EEUU. Los participantes en los mercados estarán muy atentos a sus palabras. Es la intervención más importante de Powell. Y es indudable ante el impasse que viven los mercados que Powell ejerza de guía.
Powell tendrá en cuenta a la ahora de tomar una decisión que la economía global se está desacelerando y que esta desaceleración ya está afectando a la economía de los EEUU.
En este sentido es preciso tener en cuenta que el “leading indicator” de los países de la OCDE retrocedió en mayo hasta 99, tras haber marcado 99,1 en abril y 99,3 de diciembre de 2017. Su nivel actual es el más bajo desde finales del verano de 2009 cuando la economía estaba tratando de salir de la recesión de 2008.
Esta tendencia bajista también la observamos en el “leading indicator” de la economía de los EEUU.
El crecimiento experimentado por el PIB real en base mensual de los EEUU ha sido cero en el período que comprendido entre enero a mayo de 2019. Es decir, se ha estancado. Este hecho solo ha ocurrido 3 veces en los últimos 14 años, dos de ellos en 2008 y 2009.
El modelo del FED de Nueva York atribuye una probabilidad del 32,9% al escenario que la economía de los EEUU entre en recesión, el nivel más alto de los últimos doce meses. La historia muestra que una vez que se alcanza este nivel ya no hay vuelta atrás.
Teniendo en cuenta todo lo anterior vamos a considerar como escenario más probable que Powell recorte los tipos de interés al menos 25 puntos básicos.
El S&P 500 retrocedió durante la sesión del lunes por la caída del 2% experimentada por las acciones de Apple.
El S&P 500 marcó un mínimo en 2.969. La perforación del 2.967 abriría el camino hacia el primer soporte situado en 2.940. Tal y como dijimos en nuestro comentario de ayer, mientras se mantenga por encima de 2.940 mantendremos una predisposición alcista.
Por lo que hace referencia al NASDAQ 100, vamos a considerar como escenario más probable es que a corto plazo se dirija a la zona de los 7.680. Mientras se mantenga por encima de esa referencia, consideraremos que la tendencia de corto plazo continúa siendo alcista.
El aspecto técnico que presenta el S&P 500 nos hace considerar como escenario más probable que soporte la actual fase correctiva sin experimentar grandes daños adicionales.
Por lo que hace referencia al DAX, vamos a considerara como escenario más probable que siga cayendo a corto plazo y que se dirija a la zona de soporte de los 12.350.
En cuanto al IBEX, vamos a considerar como escenario más probable que se encamine hacia el soporte de la zona 9.250.
El oro puede seguir cayendo a corto plazo. Y vamos a considerarlo como una fase correctiva dentro de una tendencia alcista que deberia impulsarlo hasta el 1.500.