¿Cuál es la razón última por la que la economía de Estados Unidos está eludiendo de momento la recesión? Para contestar esta pregunta, lo primero que tiene en cuenta José Luis Cava es el comportamiento del gobierno federal. “En el último mes, Janet Yellen ha incrementado la deuda pública de Estados Unidos en 600.000 millones. Esta asombrosa cantidad no se da salvo en situaciones de crisis extrema. Si además tenemos en cuenta que en el trimestre anterior habría incrementado la deuda pública en un billón, debemos llegar a una sencilla conclusión. La maquinaria del gasto público estadounidense va a todo gas”. Esto es lo que está impidiendo en gran medida que la economía de Estados Unidos caiga en recesión.
Ayer se publicaron los datos de crecimiento del PIB del tercer trimestre. Y la tasa de crecimiento fue “enormemente alta”. Se situó en el 4,9%. “Si vamos a las distintas partidas, nos encontramos que la inversión no fue el motor del crecimiento del PIB, más bien se contrajo el 0,1%, por los elevados tipos de interés. Y los verdaderos motores del crecimiento del PIB fueron el gasto público y el consumo privado.
El analista se centra primero en el gasto público. “El gasto público creció al 4,6%, que es una verdadera barbaridad. Pero en esta cifra del gasto público no se incluyen pagos que hace el gobierno federal. Por ejemplo, no se incluye el pago por intereses, que se ha disparado. Tampoco se incluyen el resto de transferencias que hace el gobierno federal. Pero a mí me gustaría que nos fijásemos en los intereses. Si nosotros a la cifra de gasto público que se ha tenido en cuenta para calcular el crecimiento del PIB le añadimos el crecimiento de los intereses, el crecimiento del gasto público sería mayor. Pero es que además nos estamos encontrando que los estadounidenses están percibiendo una cantidad enorme de intereses, porque se ha incrementado el tipo de interés de sus saldos y el tipo de interés de los pagarés del tesoro. Y como los consumidores estadounidenses tienen una gran propensión marginal al consumo, y probablemente se ha incrementado tras el COVID-19, este mayor gasto público por intereses amplifica el efecto del gasto público por compra de bienes y servicios. Y por ello el consumo privado se incrementa”.
¿Qué esperamos para el cuarto trimestre? “Nosotros esperamos para el cuarto trimestre que los aumentos de la incertidumbre, el efecto acumulativo de las subidas de los tipos de interés, provoque un crecimiento del PIB menor, y una inflación mayor. Esta es la razón por la que creemos que el sistema de la Reserva Federal no va a subir los tipos de interés, pero va a seguir vigilando estrechamente lo que pasa en la economía, porque es cierto, gracias al gasto público, la economía de Estados Unidos está muy fuerte, y también a la fortaleza del consumo privado. Pero el consumo privado lo más probable es que se debilite, por las estadísticas que estamos viendo más avanzadas”.
En cuanto al S&P 500, en primer lugar, Cava explica que en el mercado de opciones hay una cosa que le llama la atención. “Se está acumulando un gran volumen de posiciones en el precio de ejercicio 4.000. Esto es un riesgo bajista. Máxime si tenemos en cuenta que la gamma es negativa, y el importe de la gamma negativa se sigue incrementando”.
¿Qué es lo que nos dice el mercado de opciones a corto plazo? “Estamos viendo un soporte en la zona 4.100. El S&P 500 se movió entre 4.185 y 4.127. Esto es un movimiento lateral. Lo primero que nosotros tenemos en cuenta es que los bajistas tienen el control, y en tanto en cuanto el S&P 500 se mantenga por debajo de 4.185, nuestra predisposición es bajista”.
¿Y si supera el 4.185? “Lo más probable es que se produjera el despliegue de un tramo al alza que podrían llevar al S&P 500 a la zona 4.230-4.250. Y honestamente nosotros ahí volveríamos a buscar el lado corto”.
¿Si se perfora el soporte de la zona 4.127? “Si se perfora ese soporte, el primer objetivo es 4.100 y el segundo objetivo en la zona 4.040, y ya estaríamos pensando en el 4.000. El sentimiento de los inversores es de miedo, pero no se han alcanzado lecturas de miedo extremo. Por lo tanto, el S&P 500 podría seguir cayendo”, concluye.