Oryzon es una empresa biofarmacéutica en fase clínica y es líder europeo en el desarrollo de terapias basadas en epigenética.
Con dos compuestos en fase clínica, ORY-1001, un inhibidor de LSD1 muy potente y selectivo al que se ha concedido la designación de medicamento huérfano por la EMA, en Fase I/IIA en oncología, y ORY-2001, un inhibidor dual de LSD1/MAO-B en Fase I para el tratamiento del Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas, así como otro compuesto en desarrollo preclínico, ORY-3001, un inhibidor selectivo de LSD1 para el tratamiento de enfermedades no-oncológicas, y programas adicionales en otras indicaciones oncológicas, la empresa tiene una amplia cartera en crecimiento.
Oryzon fue fundada en 2000 por Tamara Maes y Carlos Buesa. La empresa tiene su sede central en Barcelona, España, con 35 empleados, y está considerada como una compañía biofarmacéutica de referencia en España.
Desde su fundación hasta 2008, la empresa centró sus esfuerzos en desarrollar un modelo empresarial de diagnóstico genómico, proporcionando servicios genómicos a la industria farmacéutica en Europa. En 2008, a través de la adquisición de Crystax Pharmaceuticals, Oryzon inicia programas de descubrimiento de fármacos en oncología y enfermedades neurodegenerativas, centrándose en el Alzheimer y en los cánceres hematológicos. El modelo empresarial consiste en desarrollar candidatos a fármacos patentados hasta la fase clínica II.
La empresa tiene una dirección con una gran experiencia en la industria.
El programa oncológico principal fue licenciado en 2014 a Roche, en una operación de colaboración valorada en más de 500 millones de dólares.
Tablas descriptivas de Oryzon. Tabla descriptiva del comportamiento de la acción y tabla de rentabilidad
Fuente: Bloomberg y elaboracion propia
Oryzon es una small cap, cotiza (OPV en diciembre 2015) en el mercado continuo y capitaliza 73,14 millones de € (free float un 46,9%). El performance del valor en bolsa no es positivo, acumula una minusvalía durante el último año del 25% reflejo de unos fundamentales que reflejan unas pérdidas a nivel de beneficio neto de 5,4 millones el pasado ejercicio 2016 y 2,7 millones de € durante el primer semestre del ejercicio en curso. No obstante, las empresas de biotecnología tienen un proceso de maduración largo durante la fase de ensayos, periodo durante el cual no facturan por lo que es normal y habitual que arrastren pérdidas a nivel contable.
Oryzon disfruta de un balance consolidado y reducido apalancamiento financiero (fondos propios un 50% del balance) y holgada posición de liquidez (36,3 millones de € en cash) fruto de la ampliación de capital aprobada en marzo de este año por importe de 18,2 millones de €. Por otro lado, es muy relevante en el ámbito estratégico de la compañía la reorientación necesaria y encaminada por la dirección de la empresa como consecuencia de la decisión por parte de Roche de no continuar el desarrollo clínico del fármaco experimental para pacientes con leucemia y tumores sólidos. Estos derechos de desarrollo y comercialización son recuperados por Oryzon sin coste alguno para la empresa.
Debido a la incertidumbre del plan de negocio de la empresa y a pesar de los elevados beneficios potenciales a medio plazo, nuestra valoración es negativa.
Valoración: negativa