Ya van dos grabaciones en las que supuestamente trabajadores de OHL México intentan sobornar a altos cargos públicos del país latinoamericano. Estas grabaciones ya se han cobrado la cabeza de uno de los directivos en México, Pablo Wallentin, y ahora la compañía, en un intento por limpiar su imagen y atajar el problema, podría destituir a otros empleados.
Sin embargo, el mercado no acaba de confiar en
Diego Jiménez Albarracín, del departamento de RV de Deutsche Bank, comenta que “ahora mismo OHL está en caída libre, no se ven demasiados soportes y las noticias que vienen de México son negativas. Hay que tener en cuenta que este país es muy importante para la compañía. Seguimos esperando el plan de infraestructuras de Peña Nieto que no llega y con la crisis del petróleo se verá disminuido. Con estas infraestructuras OHL podría sacar muchos contratos, pero cuantas más noticias salgan sobre escuchas y sobornos, más complicado lo va a tener y el impacto en sus cuentas puede ser importante”.
Desde Ahorro Corporación defienden la apueta por OHL. De hecho, la tienen incluida en su cartera modelo. Los expertos de esta firma justifican su elección porque consideran que "aunque el escándalo en México tiene un impacto reputacional, es poco probable que afecte a las concesiones ya adjudicadas. Por ello, estimamos que los resultados de OHL crezcan a doble dígito en 2015 apoyados sobre todo en su filial mexicana".
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