La semana pasada, los principales índices neoyorquinos terminaron el viernes a la baja y registraron sus mayores caídas semanales de 2023. El DOW JONES Ind Average, bajó un 3%, su cuarta semana consecutiva a la baja, mientras que el S&P 500 perdió un 2,7% y el Nasdaq Composite cayó un 3,3% en el acumulado.
Las acciones se hundieron especialmente el viernes tras un aumento mayor de lo esperado en la última lectura de los gastos de consumo personal (PCE), el indicador de inflación preferido de la Reserva Federal.
Este martes será la última sesión bursátil de febrero. A pesar de un sólido comienzo de año, los principales índices van camino de su segundo mes negativo en los tres últimos. Al cierre del lunes, el Dow Jones ha bajado un 3,5% en el mes y es el único índice importante negativo del año. Tanto el S&P 500 como el Nasdaq están en positivo en 2023, pero bajaron un 2,3% y un 1%, respectivamente, en febrero.
Febrero “pasará a la historia como el mes en el que el mercado retrocedió para digerir un repunte muy fuerte que se vio a fines de diciembre en la mayor parte de enero”, dijo Adam Sarhan, director ejecutivo de 50 Park Investments. “Este es un mes de retroceso, es un mes de descanso, y eso es bueno siempre que se defienda el soporte y se mantenga, que es el mínimo de la semana pasada”.
Según apunta Javier Romero, analista técnico independiente, tanto el S&P 500 como el NASDAQ 100 podría subir para después volver a caer y continuar con el movimiento correctivo. En el caso del S&P 500, el nivel a vigilar serán los 4.100 puntos.
Como se ve en el gráfico, podría ir a romper la parte baja de ese canal alcista de corto plazo en el que está ahora mismo. Y un movimiento similar puede esperarse del Nasdaq 100.
En este entorno, el experto señala que no es momento de fijarse en firmas como Tesla o Apple, que habitualmente mueven al mercado. Para la primera, hasta que no supere los 220 dólares no podría considerarse que va a prolongar las alzas y para la firma de la manzana ese nivel a superar serían los 150 dólares.
Una firma que sí lo ha hecho bien recientemente tras presentar sus cifras es NVIDIA. El valor empezó el año en 148,51 euros y cerró la última sesión en 235,01 dólares. Su PER es 133, lo que supone que es 5 o 6 veces más caro que Google, Facebook, Amazon o el doble de Tesla.
Por eso, Javier Romero recomienda fijarse en Advanced Micro Devices (AMD), que es su competencia y está más castigada que Nvidia, por lo que puede tener más recorrido.