La inflación se hace palpable en los concesionarios que tienen en stock la nueva camioneta eléctrica de Ford Motor, F-150 Lightning. Es que la misma desde su lanzamiento hace cuatro ha venido incrementando su precio debido a mayores costos de materiales y otros factores, según Nora Eckert en The Wall Street Journal.
El fabricante de automóviles de Dearborn, Michigan, dijo el martes que planea reabrir el banco de pedidos para su nueva camioneta F-150 Lightning esta semana y aumentará los precios entre 7% y 18% para muchas configuraciones.
Ford señaló que está ajustando los precios debido a los mayores costos de materiales y otros factores. Los nuevos precios se aplicarán solo a los nuevos pedidos realizados cuando el banco de pedidos vuelva a abrir el jueves, dijo la compañía.
La versión más barata de la camioneta ahora comenzará en 46.974 dólares. Eso es alrededor de 7.000 dólares más que el precio inicial de menos de 40.000 dólares que originalmente promovieron los ejecutivos de Ford.
Los fabricantes de automóviles en general han estado aumentando los precios de los vehículos eléctricos, buscando compensar los mayores costos de las materias primas como el litio y el cobalto, que son insumos clave para las baterías. Por ejemplo, General Motors agregó en junio 6.250 dólare al precio de los modelos de camionetas eléctricas GMC Hummer, que ahora oscilan entre 85.000 y 105.000 dólares, citando un aumento en los costos de logística y productos básicos.
Los ejecutivos de la industria están apostando a que la demanda de los consumidores seguirá siendo fuerte para estos nuevos modelos EV, incluso cuando aumentan el precio de etiqueta y señalan largas listas de espera para algunos modelos, incluido el F-150 Lightning. En diciembre, Ford limitó las reservas para el F-150 Lightning a 200.000 vehículos.
Siguen los problemas en la cadena de suministro
La industria automotriz todavía enfrenta obstáculos en la cadena de suministro que tienen suministros limitados de todos los vehículos, lo que infla los precios en general para los compradores de automóviles. Dado que la escasez de repuestos continúa afectando la producción, las compañías automotrices no prevén que los consumidores obtengan un alivio de precios este año o incluso el próximo.
“El nuevo rango de precios para el año modelo 2023 F-150 Lightning ahora oscilará entre 46.974 y 96.874 dólares para las configuraciones más costosas”, indicó la compañía.
El director financiero de Ford, John Lawler, dijo a principios de este año que el aumento de los costos de las materias primas ha eliminado las ganancias de otro modelo de vehículo eléctrico vendido por Ford: el Mustang Mach-E. Ford también aumentó los precios del SUV Mach-E en el primer trimestre.
Nuevas regulaciones para los subsidios
La medida se produce cuando los legisladores buscan reformular el crédito fiscal de 7.500 dólares para la compra de vehículos eléctricos, agregando nuevos requisitos para que los modelos califiquen. Entre esas nuevas restricciones estaría un tope de precio que haría que los camiones eléctricos con un precio de 80.000 dólares o más no sean elegibles para el subsidio.
Los cabilderos de la industria automotriz han dicho que los cambios propuestos harían que casi todos los modelos EV a la venta ahora no sean elegibles para el subsidio y que los modelos futuros tendrían que cumplir con un estándar alto para el contenido de baterías de origen norteamericano.
Un portavoz de Ford dijo que las revisiones propuestas al crédito fiscal EV no fueron la fuerza impulsora detrás del aumento de precios.
Ford, al igual que otras compañías automotrices globales, está tratando de agregar nuevas químicas a las baterías para sufragar los costos más altos de los materiales y establecer alianzas con fabricantes de baterías y proveedores de minerales para asegurar los suministros. En julio, Ford dijo que había asegurado suficientes insumos de batería para construir 600.000 vehículos eléctricos en todo el mundo para fines de 2023.
Ford Motor cerraba el martes en los 15.20 dólares y la media móvil de 200 periodos se encuentra por encima de las últimas velas. Mientras, los indicadores de Ei se muestran prácticamente alcistas.