Nerviosismo al comenzar la semana de la FED

Europa se decanta por comenzar la semana con optimismo, sin muchas alegrías, pero con intención de no iniciarla perforando soportes relevantes al más estricto corto plazo, hecho que casi sucede al cierre de la pasada semana cuando los bajistas del selectivo IBEX 35 amenazaron los 9.756 puntos, frontera antes de visitar los 9.505 puntos. Nuestro selectivo abre con tono positivo pero sus avances van perdiendo fuelle conforme madura el proceso de apertura, por lo que debemos seguir muy pendientes de los 9.756 puntos, zona que ha resistido a los últimos ataques bajistas. (ver: "El IBEX 35 cierra la semana en niveles de ENE15")

Fuente: Visual Chart y elaboración propia.

La apertura de hoy mantenía la línea del último tramo de la jornada del pasado viernes, tramo en el que el mantenimiento de soportes de relevancia al muy corto plazo permitía seguir manteniendo la esperanza. La subasta de apertura de hoy reforzaba esa confianza tras el intento de reestructuración desde el mismo nivel de soporte y hacia pensar en volver a retomar los 9.866 puntos, sin embargo, el nerviosismo ante la relevancia de las próximas sesiones a la espera de la FED, podría parecer un motivo válido para intentar dar una explicación lógica al movimiento bajista de los últimos minutos.

Ello nos obliga, como decimos, a seguir manteniendo la vista puesta en los 9.756 puntos y como sucedió en la sesión del viernes, evitar que los bajistas se haga con su control convirtiéndolo en una clara zona de resistencia al más estricto corto plazo. (ver: “La Teoría de la Polaridad de precios”) Este es el objetivo primario de la sesión para los toros o alcistas.

En escala diaria del mismo índice español, la apertura de hoy, pese a ser volátil y dibujar un movimiento de ida y vuelta, presenta un rango inferior al de la sesión del pasado viernes, por lo que es imposible poder detectar si verdaderamente el IBEX 35 quiere girarse al alza o continuar con las caídas, y difícil será saberlo antes de la FED ante el esperado aumento de volatilidad y/o nerviosismo en los operadores de mercado.

De momento consideramos que el movimiento se encuentra por encima de zona de relevancia al más estricto corto plazo y que ello permite consolidar el freno a las caídas, movimiento que permite relajar las lecturas derivadas de los principales osciladores clásicos de precios entendiendo que se propician las condiciones para una relajación de la volatilidad. El problema, la FED que nos va a añadir, a priori, un plus de incertidumbre de cara a las próximas sesiones.