Moody's ha elevado el rating de Irlanda hasta “Baa3” desde “Ba1”, con perspectiva positiva. Así, la calificación de la deuda soberana del país deja el nivel de “bono basura” y pasa al “grado de inversión”.
La agencia explica esta mejora en el “potencial de crecimiento de la economía irlandesa, que unida a la actual consolidación fiscal se espera reduzca los ratios de endeudamiento por debajo de sus máximos recientes; así como por la salida del programa de rescate del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea (UE) en el calendario previsto, con una mejor solvencia y de nuevo con acceso a los mercados de financiación”.
En cuanto a la perspectiva positiva, Moody's señala que “refleja las expectativas de una recuperación sostenida justo cuando las finanzas públicas regresan a la posición de superávit; así como a la convicción de que también la estabilidad en los mercados de deuda de la Zona Euro también lo será”.
Finalmente, la firma destaca que el rating podría revisarse al alza si el “Gobierno continúa cumpliendo con sus objetivos de consolidación fiscal, y la economía crece lo suficientemente rápido como para situar los ratios de deuda pública en una tendencia a la baja, que asegure la sostenibilidad de las finanzas tanto a medio como a largo plazo”. Por el contrario, se rebajaría, si dicho proceso (de consolidación fiscal) no se cumple, se incrementa el riesgo de contagio en cualquier otro país de la Zona Euro o aumentan las pérdidas en el sector financiero que se transfieren al balance del Ejecutivo”.
S.C.