La Inteligencia Artificial se ha convertido en el centro neurálgico de las operaciones de Microsoft tras su acuerdo ampliado con el propietario de ChatGPT, Open IA. Un hilo conductor que ha tomado la delantera, en paralelo como se pueden imaginar, al Metaverso que popularizó Meta, la antigua Facebook, y su fundador Mark Zuckerberg incluso cambiando su nombre.
Todo se mueve en este ámbito. Incluso unos mercados financieros, que, en su ahora recuperación tras los problemas financieros y con mucha cautela por parte de los inversores, han cambiado su mirada a los valores Big Tech en general, pero también a todos aquellos que se mueven en el entorno de la IA.
De hecho, el pasado lunes, por ejemplo, el impulso de Microsoft se vio reflejado en la recuperación general de dos sectores del S&P 500, la tecnología de la información y los servicios de comunicación, lo mejor de los últimos días en los 11 sectores que conforman el indicador de referencia de Wall Street.
De hecho, en esas derivas, dos empresas que suministran conmutadores para Microsoft, Arista y Cisco, han sido potenciadas por Evercore ISI, que ve como sus acciones se verán beneficiadas por la necesidad de avance de la Inteligencia Artificial, sus velocidades más altas y la mayor eficiencia en la red ante la demanda de modelos de lenguajes más grandes. Con un negocio que mueve los 5.000 millones de dólares.
En su gráfica de cotización vemos que Microsoft sebe un 3,2% en la última semana, con avances que rozan, en el mes, el 9%. En el trimestre suben un 12% y, en lo que va de año, las ganancias superan el 14,2%.
Como decimos, buena parte de los actuales movimientos de Microsoft se producen en ese campo. Por ejemplo, ha llamado la atención, aunque no a los más conspiranoicos, la eliminación al completo del equipo de ética de Inteligencia Artificial de la compañía, dentro de ese plan de recorte de empleos anunciado en enero y que se prolongará hasta el año que viene. En especial por las medidas de seguridad, a modo de cortafuegos, que podía imponer en este equipo para garantizar los límites de la IA.
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Pero también se ha producido la presentación de Microsoft 365 Copilot, una herramienta, asistente, de inteligencia artificial que funciona dentro del ecosistema de sus aplicaciones, desde Word a PowerPoint, pasando por Outlook o Teams, tal y como ya señaló que haría, la empresa. De momento lo está probando en una serie de clientes seleccionados, para ampliarlo en unos meses al resto de sus usuarios. Sus posibilidades, por ejemplo, en el caso de Outlook, pasan por escribir correos y mejorarlos.
En cuanto a recomendaciones, desde Tipranks vemos que una gran mayoría de los analistas que siguen el valor optan por comprar. De hecho, de 31 consultados, 26 optan por hacerlo, con 4 más que mantienen su consejo de mantener el valor en las carteras y sólo uno opta por comprar. En cuanto al precio objetivo, marca 291,74 euros por acción, que dejan solo un margen de mejora potencial del 6,3% para las acciones de Micrososft.
Desde Evercore ISI acaban de elevar su precio objetivo hasta los 295 dólares por acción desde los 280 anteriores, mientras sobreponderan el valor en el mercado, que valora el lanzamiento de Copilot. Un lanzamiento que, desde la firma indican que sirve de apoyo a por qué esperan que Microsoft se mantenga en una posición de liderazgo en términos de la adopción de la Inteligencia Artificial, en especial, en el mercado comercial.
Afirman desde Evercore ISI que Microsoft se encuentra en una posición única para poder integrar la IA en su cartera de aplicaciones dominante y aprovechar los datos de terceros para brindar importantes beneficios de productividad a sus usuarios.
Mientras, desde Mizuho incluso elevan su precio objetivo hasta los 315 dólares desde los anteriores 300 mientras refrendan su apuesta de compra por el valor. En el caso de RBC Capital refrendan su actual PO, en los 285 dólares por acción, mientras también dejan sin cambios su recomendación de sobreponderar el valor en las carteras de los inversores.