Las diferencias por llamarlo de un modo suave entre los dos archimillonarios Elon Musk y Mark Zuckerberg no son ninguna novedad. Lo que es novedoso, en el caso del fundador de Facebook es esta faceta de preparación para la lucha que estamos viendo en Instagram a cuenta también, no lo olvidemos, de la puesta en marcha del gran peligro para la antigua Twitter: hablamos de Threads, que vive horas bajas, si se puede decir así, justo del boom que supuso su lanzamiento.
De ahí que las dotes sociales nunca ponderadas por el ahora máximo responsable de Meta lo han llevado a fotos como esta, que Zuckerberg ha colgado en Instagram y a una preparación de órdago para una pelea de verdad, cuerpo a cuerpo, aunque en ningún caso, en estos meses en los que se viene hablando de ella, no se conocen en qué consistirá en realidad.
El reto entre ambos, a los que además separan 13 años en favor de Zuckerberg con 39 frente a los 51 del dueño de Tesla, podría tratarse de un enfrentamiento en los que se llaman artes marciales mixtas, dentro de una jaula. Y el objetivo final, a pesar de sus discrepancias sí es común.
Tras los grandes desatinos del gran millonario y visionario Musk al frente de Twitter y su cambio de nombre, desde los despidos masivos y la gran evasión, con la llegada apresurada de ingenieros de Tesla, los problemas de la compra, primero fallida y sus constantes cambios en la red que creara Jack Dorsey, ahora le llega la competencia de Threads de Meta para subir la puja de la nueva X, ya sin el pajarito, en su día un monarca nuquinegro.
En un post, antes tuit, Elon Musk ya indica que ellos desde X retransmitarán ‘el acontecimiento’ todavía sin fecha fija, pero que, desde Meta, establecen pistas para que se produzca en este mes de agosto. Con 621.000 me gusta para ese nuevo post de Musk. Crear expectativas en las que sí es especialista el megamillonario, tal y como ha hecho en más que numerosas ocasiones a cuenta de sus lanzamientos en Space X o incluso de su cybertuck, que nunca parece llegar.
Ambos se juegan mucho para sus redes sociales en este ‘enfrentamiento’ de carácter solidario y que puede potenciar de forma significativa a sus usuarios. En el caso de Threads, de los 100 millones activos de su primera semana a la caída del 82%, según los datos de la CNN de los registrados en las cuentas de Instagram que han dejado de ser activos en ellas.
Además, el tiempo que los usuarios pasan en ella también se muestra a la baja. Pasa de los 20 minutos iniciales a apenas los 3 de media actuales. La suma de números famosos en las primeras fases desde Katy Perry a Shakira impulsó su uso, pero pronto han dejado de publicar con asiduidad.
Pero a pesar de todo, los últimos resultados de Meta solo han refrendado un año de subidas a triple dígito, para uno de los mejores valores del Nasdaq en lo que va de año, con caídas semanales del 5% pero avances en el mes de casi un 7% en el trimestre del 34% y que superan el 158% en lo que va de año, el segundo mejor desempeño en el Nasdaq 100 tras NVIDIA. Un ejercicio bursátil que está siendo de ensueño para la empresa de Zuckerberg.
Sigue en directo la cotización de Meta (Facebook)
Además, en cuanto a recomendaciones, desde TipRanks colocan a Meta con un potencial del 21,5% hasta los 377,70 dólares por acción, con 39 de los 41 analistas que siguen el valor que recomiendan comprar y solo dos mantener. Aunque sus últimas recomendaciones individuales superan esa cifra. Es el caso de la de JMP Securities con PO de 380 dólares y la de Wells Fargo que le otorga un precio objetivo de 389 dólares.
Por su parte, la antigua Twitter dejó de cotizar el 8 de noviembre de 2022 en el mercado, una decisión de Elon Musk tras pagar 44.000 millones de dólares por la compañía e intentar implementar novedades como el cobro de las cuentas verificadas y otras modalidades que sigue estudiando. Otra de las empresas de Musk, perjudicada en su día por la venta de acciones para lograr efectivo en la compra de la ahora X, es Tesla cuyo ejercicio también se está mostrando claramente positivo, tras reponerse del efecto pernicioso de la compra de Twitter. De hecho, en lo que va de año, sube un 107%.
Ahora, más que el enfrentamiento entre sus dueños, el efecto es la pelea entre X y Meta, en plena reconversión de la nueva X con sus fórmulas para obtener nuevos ingresos y de las nuevas normas impuestas desde la llegada a la red de microblogging de Elon Musk, que llevó a una pérdida significativa de usuarios, millones desde finales del pasado ejercicio, 11 años después de perder sus señas de identidad características y su color azul.