El European Hydration Institute (EHI), fundación que promueve la hidratación humana y sus efectos para la salud, el bienestar y el rendimiento físico y cognitivo, recomienda a los estudiantes españoles que presten una especial atención a sus necesidades de hidratación durante el estudio para ayudar a optimizar la capacidad cognitiva.

Una buena hidratación es importante para la salud física y mental. El cerebro representa sólo un 2% del peso corporal, pero recibe un 20% del flujo sanguíneo. Cuando el cuerpo está deshidratado, el volumen de sangre en el cuerpo baja y existe peligro de que la cantidad de sangre (y por tanto de oxígeno y nutrientes vitales) que alcanza el cerebro también se vea reducido.

El Prof. Lluís Serra-Majem, miembro del Comité Científico Asesor del EHI y Catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria comenta “En nuestro país los exámenes finales coinciden con el inicio del calor intenso y por ello es muy importante proveerse de los líquidos necesarios durante el estudio”.
El Profesor continua: “No olvidemos que estando adecuadamente hidratados nuestro rendimiento en los exámenes será mejor que si llegamos a los mismos con falta de líquidos”.

La realización de tareas físicas y mentales puede verse negativamente afectada por el calor y la deshidratación. La pérdida de un mero 1%-2% del peso corporal puede hacer que las personas que tengan dificultades de concentración sientan mayor cansancio2.

El mantenimiento de una hidratación adecuada permite que el cuerpo se autorregule. Hay evidencias que indican que puede reducir la gravedad del dolor de cabeza, el cansancio y la pérdida de concentración. Esta conducta es crucial cuando hay necesidad de concentración en el estudio y aprendizaje.

La deshidratación afecta negativamente en la función cognitiva3,4 y esto cobra especial importancia en tareas como el estudio, que requieren de una concentración profunda. De esta forma cuando una persona está hidratada, las células del cerebro cuentan con un mejor nivel de oxígeno en sangre que es clave para para mantenerlo alerta. Es esencial, por tanto, prestar especial atención a la hidratación cuando es necesario concentrarse durante los estudios y el aprendizaje.

En situaciones en las que la deshidratación no es tan severa (disminución del nivel de hidratación en un periodo de tiempo breve - unas horas) los estudios generalmente han encontrado evidencias que muestran deteriorito cognitivo4.

Los estudios que encuentran relación entre la deshidratación y el rendimiento cognitivo deben ser interpretados con cautela, para determinar los efectos de la deshidratación independientemente de los efectos de estrés (por ejemplo, tensión térmica y estrés físico, fatiga, etc.) 5.

Sin embargo los efectos fisiológicos que se producen en el cerebro por la deshidratación, como el estrés, podrían ser considerados en sí mismos negativos. Esto mantiene el concepto de que un adecuado estado de hidratación es importante para enfrentarse a tareas cognitivas. El alcance y la duración de la deshidratación que conlleva un deterioro cognitivo y sus efectos aún no se han investigado6.

Recomendaciones básicas para estar hidratado durante el estudio

®    Antes de ir al colegio, o a la universidad es importante asegurarse de que el estado de hidratación es el adecuado: el desayuno debe incluir el líquido suficiente para conseguirlo. Dos estudios han demostrado que los niños normalmente empiezan el día escolar parcialmente deshidratados7,8.

®    Es conveniente beber agua a lo largo del día, y tomar bebidas regularmente, en especial si el ambiente es cálido.

®    Los profesores deben asegurarse diariamente de que hay tiempo para hidratarse en el colegio, en el instituto o en la universidad y recordar a los estudiantes que tienen que hacer uso de esos momentos. Una tarea que también deben fomentar las familias.

Para educar a los alumnos en controlar su propio estado de hidratación puede ser de utilidad. El color de la orina que ofrece una estimación útil del grado de hidratación en él se encuentra durante las actividades diarias9

¿Por qué se debe prestar especial atención a determinadas comidas?:

Comer ayuda a estimular la sed causando la ingesta de líquidos adicionales y el restablecimiento del equilibrio de líquidos10.

 Los alimentos aportan de media un 20%-30% de la cantidad diaria de agua recomendada, y el  70%-80% restante proviene de la variedad de las bebidas (de todo tipo, no sólo a través de agua4,11). Sin embargo, este dato puede variar dependiendo del tipo de dieta y de las elecciones de cada individuo4,11.

 Acerca del European Hydration Institute

El European Hydration Institute (EHI) es una fundación creada con el fin de avanzar y profundizar en el conocimiento acerca de la hidratación humana y sus efectos sobre la salud, el bienestar y el rendimiento físico y cognitivo. El European Hydration Institute se creó ante la necesidad expresada por una serie de científicos, nutricionistas, dietistas y profesionales de la salud, de disponer de una fuente de información de referencia que reuniese todos los conocimientos y avances científicos sobre hidratación, permitiera el diseño de estrategias para avanzar en su entendimiento y comprensión y que proporcionara apoyo a los esfuerzos destinados a garantizar que los ciudadanos europeos están adecuadamente hidratados.


 

  1. Eurostat: Oficina de Estadística de la Unión Europea.
  2. Shirreffs et (al 2004)
  3.  Gopinathan PM, Pichan G, Sharma VM. Arch Environ Health 1988;43:15-7.
  4. Szinnai G, Schachinger H, Arnaud MJ, et al. Am J Physiol Regul Integr Comp Physiol 2005;289:R275–R280.
  5. Institute of Medicine: Dietary reference intakes for water, potassium, sodium, chloride, and sulfate. Washington, DC: The National Academies Press, 2005.
  6.  Lieberman HR. J Am Coll Nutr. 2007;26(5 Suppl):555S-561S.
  7. Bonnet F, Lepicard EM, Cathrin L, et al. Ann Nutr Metab. 2012; 60(4):257-63.
  8.  Assael BM, Cipolli M, Meneghelli I, et al. J Nutr Disorders Ther 2012;2:3
  9. Kolasa KM, Lackey CJ, Grandjean AC. Nutrition Today 2009;44:190-201.
  10.  Maughan RJ, Leiper JB, Shirreffs SM.Eur J Appl Physiol Occup Physiol 1996;73(3–4):317-25
  11. Manz F, Johner SA, Wentz A, et al. Br J Nutr 2012; 107(11):1673-81.