En ese estudio, Lyxor compara los rendimientos de los fondos de gestión activa domiciliados en Europa con sus índices de referencia, cubriendo 32 universos de inversión de gestión activa (28 tradicionales y 4 alternativos), equivalentes a casi 7.000 fondos representando 1.600 millones de euros de activos gestionados.
La correlación casi generalizada de los activos y las incertidumbres macroeconómicas y políticas, impidieron la generación de alfa.
El número de gestores que no lograron batir su índice de referencia fue mayor que en años anteriores. Fue difícil encontrar un fondo que no hubiera terminado en números rojos el año, con una dispersión media de los resultados inferior a otros años.
Únicamente el 27% de los gestores de renta variable (RV) superaron los resultados de sus índices de referencia, mientras que en renta fija (RF) los resultados fueron peores, con sólo un 18% superándolo.
Por el lado positivo, los fondos alternativos UCITS obtuvieron resultados mejores que los fondos tradicionales. Los hedge funds sufrieron del repunte de la volatilidad y más aún por el desplome de la RV en el último trimestre.
Las principales observaciones son:
· El año 2018 resultó muy difícil para la gestión activo y uno de los peores en más de una década. Las incertidumbres políticas y económicas, la falta de claridad en la trayectoria de los tipos de interés complicaron la generación de alfa.
· Únicamente el 24% de los gestores superó a su índice de referencia, porcentaje mucho menor al 48% de 2017 y por debajo del promedio anual de la última década.
· La gestión activa growth o de crecimiento en EE.UU., Europa y los fondos de pequeña capitalización EE.UU. tuvieron los mejores resultados. La gestión activa de deuda emergente, de deuda corporativa de EE.UU. y de Francia fueron los que más sufrieron, con menos del 15% de los fondos de cada universo batiendo en resultados.
· En cuanto a dispersión de los resultados, el 20% de los fondos que batieron a su índice lo hicieron por un promedio de 0,5%, mientras que los que lo hicieron peor que el índice lo hicieron un 20% peor en promedio.
· Sólo el 27% de los gestores activos de renta variable batieron a su índice de referencia vs. 51% del año anterior y por debajo la media anual del 38% de la última década. Ello fue resultado de un incremento en la volatilidad y en las revisiones de beneficios, así como por el incremento de la correlación entre los diferentes activos, y la irracionalidad del comportamiento a los fundamentales.
Los mejores resultados fueron los active US growth y Europa y EE.UU. small caps.
· La gestión activa en renta fija lo hizo aún peor ya que sólo el 18% batió a su índice vs. 41% de 2017.
Los mercados de bonos gubernamentales de EE.UU. y de la eurozona aumentaron un 1% respecto de 2018, pero todas las demás categorías de renta fija cayeron en valor durante el año. Los bonos corporativos estadounidenses perdieron un 2,5% y el HY europeo cayó un 3,6%. La reversión del ciclo de crédito y la evolución de los tipos de interés no fueron bien anticipados por los gestores activos, lo que afectó su desempeño.
· Los fondos activos han demostrado mayor propensión a superar en mercados bajistas, pero mantener eso en posteriores mercados alcistas es mucho más desafiante.
· El año también fue débil para los hedge funds UCITS de renta variable, pero lo hicieron mejor respecto a sus índices de referencia que los fondos tradicionales.