El fuerte repunte vivido a finales del año pasado ha perdido fuelle en la renta variable global. Si nos fijamos exclusivamente en Europa, la bolsa española ha empezado 2024 con un tono mucho más dubitativo que el resto de sus homólogas europeas. Así, el IBEX 35 acumula restas en lo que llevamos de año que rozan el 3%, mientras que el DAX alemán avanza ligeramente un 0,60%, el CAC 40 suma un 1,4% y el EURO STOXX 50 repunta un 2,60%.
Si comparamos estos números con los de la bolsa americana, las diferencias son algo mayores, sobre todo en el caso del NASDAQ 100, que ya repunta un 5,30%, mientras que el S&P 500 y el DOW JONES suben un 3,12% y un 1,05%, respectivamente.
Bolsa europea vs americana
En este punto, y antes de hablar de sectores, son muchos los inversores que se preguntan si 2024 será el año de la bolsa europea o de la americana. Fernando Luque, editor de Morningstar, señalaba en una entrevista con Ei el pasado 12 de enero que "tradicionalmente uno cree que la bolsa europea está más infravalorada que la americana, pero no es así. No hay grandes diferencias de valoración entre la bolsa europea y la americana. Lo que sí vemos es diferencias de valoración a nivel de sectores".
De esta forma, para Luque, "en Europa hay algunos sectores que nos parecen baratos como son el sector de consumo defensivo y el de salud, mientras que en EEUU vemos más atractivos sectores como son el de materiales básicos y el inmobiliario".
Sin embargo, si compramos el mensaje de que la renta variable europea lo hará mejor, la siguiente preguntas es: ¿qué sector? Y, en este sentido, y con 2023 ya cerrado, según datos de Bloomberg, el año pasado los que mejor evolucionaron fueron ventas minoristas, tecnológico, construcción y servicios financieros, todos ellos con una rentabilidad superior al 25%.
Si tiramos de análisis técnico, a cierre de diciembre, ventas minoristas era también el sector más fuerte -con tendencia alcista tanto a medio como largo plazo- junto a tecnología, inmobiliario y servicios públicos.
Qué esperar de los sectores europeos
Pero, ¿continuará la tendencia? No en todos, en opinión de la analista de Ei, María Mira, que sí asegura que el año 2024 será "alcista para la tecnología, turismo, industria y seguros, principalmente. Estos sectores deberían continuar la racha alcista de 2023 y recibir flujos de inversión, aprovechar nuevas innovaciones, recoger frutos de reestructuraciones de costes en el caso de industria, dinamismo en la demanda en turismo y un sector seguros con tipos a favor de sus inversiones y buena dinámica en primas".
Por otro lado, el sector de telecomunicaciones también debería hacerlo bien "si salen adelante las operaciones de consolidación que están sobre la mesa". Por su parte, banca, salud y recursos básicos también tienen por el momento catalizadores: la banca seguirá recogiendo buenos márgenes con tipos altos por lo menos en la primera mitad del año y la segunda mitad debería compensar el recorte de tipos con mayores comisiones, salud es un sector defensivo y será especialmente positivo para las compañías que unen salud con biotecnología, y recursos básicos es otro sector defensivo en un año en el que no esperamos crecimiento macro".
Para Rafael Ojeda, analista macro global de Fortage Funds, un sector que lo puede hacer relativamente bien en Europa es el retail, con empresas como Inditex o LVMH a la cabeza, "no tanto por el contexto sino por la fortaleza que tiene este tipo de compañías, que pueden hacerlo mejor que las pequeñas al tener más capacidad de escala, de financiación a mejores tipos, imagen de marca muy fuerte, pueden repercutir a sus clientes la subida de costes y son líderes a nivel mundial en sus segmentos".
En la salud y la banca, Ojeda coincide con María Mira. En cuanto al primero, señala que "el sector farmacéutico puede hacerlo muy bien porque es un poco contracíclico, es decir, estas empresas lo harán bien o mal en función de sus propios desarrollos tecnológicos o médicos, independientemente del ciclo en el que nos encontremos; son compañías muy seguras en momentos de ciclos complicados". Respecto al financiero, Ojeda cree que "lo puede hacer relativamente bien, no tanto porque vaya a tener unas subidas muy significativas, pero sí son compañías muy bien capitalizadas, con ratios de solvencia muy altos, no están tan apalancadas como antes, sus balances son mejores y reparten un dividendo los suficientemente interesante como para entrar ahí".
Añadir que en Europa tenemos pequeñas joyas en el sector tecnológico como SAP o ASML, de ahí que "más que en sectores me centraría en empresas concretas".
Por último, desde ING afirman que sectores de la UE como la industria manufacturera, la dotación de personal y la construcción, podrían experimentar un desarrollo débil en 2024. Mientras, los volúmenes de transporte y comercio minorista experimentarán una ligera recuperación, y Tecnología, Medios y Telecomunicaciones (TMT) mostrarán cifras de crecimiento menores, pero aún altas.
En las últimas décadas, el sector europeo de la información y las comunicaciones ha crecido mucho más rápido que la economía en general. "Esperamos que esta tendencia continúe en 2024, aunque la diferencia será menor que en años anteriores. Estimamos un crecimiento del volumen de poco más del 4% en 2023 y pronosticamos un crecimiento del volumen del 4% en 2024". Unido a ellos creemos que "aumentará la inversión en automatización, ciberseguridad, software e inteligencia artificial, mientras que disminuirá la inversión en hardware. Además, es probable que el gasto en TIC en Europa aumente alrededor de un 5% anual. El crecimiento en el sector de las telecomunicaciones será más moderado en el sector de software y servicios. Por último, aunque el entusiasmo es alto, la IA generativa aún no conducirá a un mayor crecimiento del volumen en 2024. Muchas empresas de software empresarial esperan lanzar sus versiones iniciales de paquetes de software que incluyan IA generativa en la primera mitad de 2024, pero el lanzamiento de estos Los paquetes también llevarán tiempo. Por lo tanto, 2024 será un año de transición".
Por su parte, en el sector minorista están surgiendo señales de recuperación. "El desempleo acaba de alcanzar otro mínimo histórico y el crecimiento de los salarios reales está aumentando, dos señales de que el crecimiento del ingreso disponible parece mejorar para el próximo año. Después de una larga reducción de bienes, el ciclo de reemplazo comenzará a generar una renovada popularidad para algunos bienes que fueron sobrecomprados durante la pandemia. En diciembre, los minoristas se volvieron más optimistas sobre los meses venideros. No esperen milagros, pero parece que se está gestando un fondo y cierta recuperación en el transcurso de 2024", cuentan desde ING.