El estudio, que entrevistó a más de 36.000 consumidores que utilizan Internet en 19 países europeos, muestra cómo la adopción de los consumidores de los pagos digitales ha cambiado extraordinariamente en los últimos 12 meses. Hace un año, el 38% de los encuestados dijo que nunca había utilizado un dispositivo móvil para realizar pagos y no tenía intención de hacerlo. Hoy, ese número se ha reducido a solo un 12%.

¿QUIENES SON Y QUÉ ESTÁN COMPRANDO?

Cuando observamos los diez primeros países en los que los pagos móviles son más frecuentes, estos se dividen en dos categorías: los mercados en desarrollo como Turquía y Rumania, que han ido adoptando las nuevas tecnologías de forma más rápida dejando de lado los métodos de pago tradicionales; y los mercados desarrollados - en particular los países nórdicos - que están adoptando estas nuevas tecnologías a diferentes ritmos. En España, casi tres cuartas partes de la población encuestada (72%) son usuarios de pagos por móvil[1]. Uno de cada 3 usuarios, el 36%, ya usan sus dispositivos para transferir directamente dinero a sus familiares y amigos y hasta un 39% realizan la compra de los billetes de transporte público utilizando este medio.

[1]Un usuario de pago móvil es definido como alguien que utiliza su teléfono, tablét o wereable para gestionar su dinero o realizar un pago en persona, vía online o desde una app. 

Curiosamente, los usuarios de pagos móviles también dicen que se encuentran igual de cómodos haciendo compras más caras a través de dispositivos móviles como efectuando los pagos diarios. En España, en torno a un tercio de los encuestados (35%) realizan compras de valor elevado, como dispositivos electrónicos, muebles, etc.

LA BANCA MÓVIL AL ALZA

La investigación también muestra que la actividad de banca móvil está aumentando en todos los grupos de edad. Mientras que los milenials siguen siendo la categoría más prolífica, otros grupos de edad, están avanzando rápidamente. Así, los rangos de edad comprendidos entre los 18-24 años y de 55 a 64 años han experimentado el mismo crecimiento de uso en tan solo un año (+13%) 
En España, casi la mitad (48%) de los encuestados de entre 55 y 64 años utilizan actualmente sus dispositivos móviles para gestiones con su banco, comparados con el 44% que accedían a la banca online a través de una app en 2015.
En el resto de Europa, el repunte en el número de encuestados que utilizan la banca móvil también está ayudando a más personas a realizar un seguimiento de sus gastos y responsabilidades financieras - dos quintas partes (41%) - dice comprobar regularmente su saldo online a través de una aplicación de banca. En España, este porcentaje se eleva hasta el 60%.
Carmen Alonso, Directora General de Visa España, ha declarado:

“Estos datos confirman que ya ha llegado el futuro de los pagos digitales, con los consumidores en toda España y Europa adoptando una gran variedad de nuevas formas de pago. Visa considera los smartphones y wereables como el comienzo de una tendencia más amplia, con millones de nuevos dispositivos conectados que hacen más simple y segura la integración de las transacciones de comercio diarias con casi cualquier tecnología.”

"En Europa, hemos visto recientemente el lanzamiento de Apple Pay en el Reino Unido, Francia y Suiza. Samsung Pay se ha puesto en marcha en España e igualmente Android Pay en el Reino Unido. También hemos visto una nueva era de pagos portátiles: smartwatches, pulseras y hasta la ropa. Es evidente que esta tendencia continuará acelerándose, lo que permitirá a los consumidores elegir el dispositivo conectado que más encaje con su estilo de vida".

CORRELACIÓN CON CONTACTLESS

Este aumento en el uso de los pagos digitales coincide con una mayor adopción de la tecnología contactless. La investigación indica que, en todos los grupos de edad, los pagos sin contacto son ahora la norma. En España, más de la mitad de las personas encuestadas (58%) han utilizado tarjetas contactless este año, lo que supone un importante aumento con respecto a 2015.

En toda Europa, los usuarios contactless también están más dispuestos a adoptar nuevas formas de pago que aquellos que no utilizan tarjetas sin contacto. El estudio pone de manifiesto la correlación entre el uso del contactless y los nuevos métodos de pago, revelando que los usuarios de tarjetas sin contacto están más interesados en el uso de un dispositivo móvil como medio de pago en una tienda (52% de usuarios de tarjetas sin contacto vs 32% de no-usuarios), compras a través de una aplicación de comercio (49% vs 31%) o el uso de un dispositivo móvil para pagar por una comida (50% vs 30%).