Especialmente negativa está siendo la sesión en la bolsa hoy para las acciones de Renault cuyos títulos se revalorizaban un +15% desde el anuncio de la operación. En la bolsa el valor cae hoy más de un 6,6%; Fiat Chrysler Au se deja más de un 1%; Peugeot, por su parte, avanza cerca de un 2% ante la expectativa de que sea ella la que logre un acuerdo con Fiat.

COMPAÑÍA

Precio en euros

Variación %

Renault

52,45

-6,66

Fiat Chrysler

11,56

-1,20

Peugeot SA

20,97

+1,8

Daimler

48,07

+0,04

Volkswagen AG Preference Shares

143,48

+0,48
 

Y es que este miércoles Fiat Chrysler retiraba su oferta de fusión con Renault dadas las dificultades de tipo político que está encontrando. El Gobierno de Francia y la japonesa Nissan son los principales accionistas de la compañía francesa. Ambos mantienen un 15% de participación en el capital de Renault con la diferencia de que Nissan no tiene derechos de voto. Al parecer ambos accionistas estaban preocupados por la dilución de su participación en Renault y pedían el pago de un dividendo. Además, el gobierno francés había cuestionado el impacto en el empleo de esta operación.

“Ambos están poniendo trabas a la operación, con una postura muy intervencionista por parte del Ejecutivo francés, como suele ser habitual en este país en todo lo relacionado a las grandes operaciones corporativas”, opina el analista de Link Securities, Juan J. Fdez-Figares.

Para los expertos de Bankinter se trata de malas noticias. “La operación tenía sentido estratégico. Gracias a la fusión Renault habría aumentado su presencia en EE.UU. y Fiat en Europa. En un escenario de incertidumbre comercial este movimiento permitiría, entre otras cosas, derivar producciones para amortiguar la imposición de aranceles. Además, facilitaría a Fiat cumplir con los nuevos estándares de emisiones a partir de 2021 en Europa”.

Además, ambas compañías compartirían el esfuerzo inversor en nuevas tecnologías en un momento de ralentización económica y caídas de ventas. Las sinergias se calculaban en unos 5.000 millones de euros. Ahora ambas compañías deberán centrar su estrategia a futuro y aclarar cómo afrontará los retos que esta operación facilitaba.

Atentos a Peugeot y a Carlos Tavares

 

 

Según publicó Bloomberg el pasado 30 de mayo, Carlos Tavares, CEO de PSA, habría enviado un comunicado interno a la cúpula de la marca advirtiendo de los peligros que entrañaría esta fusión. Recordemos que Tavares ostentó, hasta 2013, uno de los puestos de mayor relevancia en Renault, siendo el número dos de la marca tras Carlos Ghosn.

Para Tavares, la decisión de Fiat de asociarse con Renault representaba una oportunidad perdida. Desde su llegada en 2014, este ejecutivo de 60 años de edad, ex protegido de Ghosn en Renault, dio un giro a la compañía al centrarse sin descanso en la eficiencia y la escala. A principios de este año se entrevistó con Fiat para construir una nueva "superplataforma" antes de que la empresa italo-americana cayera en brazos de Renault.

En el Salón del Automóvil de Ginebra de marzo, parecía que Fiat y PSA se emparejarían. De hecho, Tavares y su homólogo de Fiat, Mike Manley, hablaron públicamente sobre el deseo de participar en la consolidación.

Pero el presidente de la Fiat, John Elkann, no estaba convencido. Un acuerdo con PSA se basaría en recortes de empleo perjudiciales y políticamente desagradables, mientras que Renault, con sede en el suburbio parisino de Boulogne-Billancourt, ofrecía un programa más avanzado para los coches eléctricos y un mayor acceso a Asia a través de Nissan.

Ahora Tavares puede tener opciones, que también parece barajar con Jaguar Land Rover. Más de las tres cuartas partes de los ingresos de PSA provienen de Europa, donde los fabricantes de automóviles se enfrentan a una ralentización del consumo y a una reducción de los márgenes de beneficio debido a unas normas de emisión más estrictas.

Fuente: Bloomberg

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