Los hogares y las instituciones privadas sin fines de lucro al servicio de los hogares han pasado de tener 950 millones de euros en letras del Tesoro en noviembre de 2022 a 23.977 millones en el mismo mes de 2023, convirtiéndose por cuarto mes consecutivo en los mayores tenedores de este tipo de deuda a corto plazo.

Según los últimos datos publicados por el Banco de España y recogidos por Europa Press, la alta rentabilidad de los valores a corto plazo ha tenido un efecto muy considerable en la distribución las tenencias de las letras del Tesoro, donde los hogares e instituciones no financieras han incrementado notablemente su participación en el último año, pasando de una cuota del 1,3% en noviembre de 2022 a más del 30% en 2023.

Tras elevar su tenencia un 4,7% respecto al mes de octubre, los hogares se sitúan en noviembre por cuarta vez en la historia como el mayor tenedor de letras del Tesoro español, por delante de los inversores extranjeros (16.737 millones), que desde julio han ido reduciendo sus tenencias en este tipo de deuda.

Por detrás de los inversores extranjeros, los siguiente tenedores de letras del Tesoro son las instituciones financieras monetarias (10.918 millones), los fondos del mercado monetario y otros intermediarios financieros (10.189 millones), las sociedades no financieras (6.015 millones) y las administraciones públicas (4.104 millones).

La mejora de los intereses ofrecidos, en línea con las subidas de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) en los últimos meses, ha mantenido el apetito inversor de los mercados por los títulos españoles.

Para el programa de financiación del Tesoro en 2024 se prevé una reducción de las necesidades de financiación nueva en comparación con 2023. La emisión bruta ascenderá a 257.572 millones de euros, un 2% superior a la de 2023, y se cubrirá mediante la emisión de instrumentos a medio y largo plazo para mantener la vida media de la cartera de deuda pública.

Además, se llevarán a cabo subastas ordinarias de Letras y Bonos y Obligaciones del Estado, así como sindicaciones para la emisión de determinadas referencias de Obligaciones del Estado. También se buscará mantener la diversificación de la base inversora y apostar por la emisión de bonos verdes como parte del programa de financiación.