Sin rastro del tapering y a la espera de que la Reserva Federal se reúna la próxima semana, los mercados prefieren ir recogiendo los beneficios cosechados durante todo el ejercicio. Y  eso, además, se ha notado, y mucho, en los flujos de fondos.

En total, salieron 4.200 millones de dólares de fondos de bonos y unos 1.400 de fondos de renta variable.


Estados Unidos ha sufrido  la segunda semana consecutiva de salida de dinero por un importe de 1.100 millones de dólares.  Coincide con un periodo de caídas en la bolsa que se acerca al 2% y que aleja a los principales selectivos de los máximos alcanzados unas semanas antes.

La posible puesta en marcha del tapering, además, ha afectado también a la evolución de la renta fija, con lo que las cifras tienen mucho sentido.

Según los datos que prepara EPFR y que recoge hoy Citi, sólo Europa ha recogido entradas significativas de fondos en renta variable durante la pasada semana que terminaba el 11 de diciembre.  En concreto, llegaron 4.500 millones de dólares.

Mientras tanto, los países emergentes han sufrido la séptima semana consecutiva de salidas netas.  

Las cifras de Barclays apuntan a unas salidas de 1.950 millones de dólares  de fondos de renta variable y los de bonos 1.610 millones de dólares.  

Pero no en todas las regiones ha sido lo mismo. Han sufrido más GEM, con 1.300 millones de dólares salidas y Asia 524 millones de dólares. En Latam  la cifra ha sido menor, de 143 millones, mientras que EMEA y China recibieron entradas netas.