Es significativo que entre los 31.000 encuestados entre 20 países, España sigue siendo uno de los países más pesimistas con respecto a su futuro, solo superados en negatividad por los franceses y los japoneses.
Pero eso no quita para que, como explican en BlackRock, “la situación de la economía del país continúa siendo la principal preocupación de los españoles cuando piensan en su futuro financiero (56%), a pesar de haber descendido tres puntos respecto al 2014”. Nuestras mayores preocupaciones son la seguridad laboral y el alto coste de la vida.
Quizá las caídas en bolsa de los últimos meses han provocado que “el porcentaje de aquellos que sienten que están tomando la decisión correcta de inversión ha caído del 55% del año pasado a un 49%. Cabe destacar que entre toda la población española encuestada, el sector más joven, comprendido entre 25-44 años, son los más seguros a la hora de tomar decisiones de inversión”, explican en BlackRock.
El estudio muestra que la actual asignación de activos de las carteras de los españoles que el 65% se encuentra en efectivo, el 11% renta variable, el 3% en bonos, el 10% en propiedades, el 2% en alternativos y un 8% clasificados como “otros”.
Pero, ¿qué es lo que queremos cuando pensamos en nuestro futuro financiero? Explican en la entidad que en España tenemos los mismos deseos que en el resto de Europa: ahorrar dinero, asegurarse una buena jubilación y conseguir financiación para la educación de los hijos.
A pesar de ser una de nuestras principales preocupaciones, solo la mitad de los españoles ha comenzado a ahorrar. Eso sí, la cifra mejora ligeramente desde el 47% del año pasado. Pero, “a pesar de que ha habido un aumento, el porcentaje continua siendo muy inferior a la media europea (59%) y la global (65%)”, dicen los autores del informe. Y eso que apenas un 25% de los encuestados considera que el sistema público de pensiones será suficiente como para hacer frente a nuestras necesidades.
Para Aitor Jauregui, responsable de desarrollo de negocio de BlackRock en España, Portugal y Andorra “desde un punto de vista positivo, cabe destacar que los inversores españoles son los que más recurren al asesoramiento financiero y esto contribuirá a una transición gradual del ahorro a corto plazo a la inversión a largo plazo, así como a una mayor diversificación de sus carteras para lograr sus objetivos”.
Según el estudio, “el exceso de efectivo se puede explicar, entre otras razones, por la preocupación ante la posibilidad de perder dinero, opción señalada por un 24% de los encuestados. Cuando se toman decisiones sobre el ahorro o la inversión, más de la mitad, 52%, entienden el “riesgo” de las inversiones como la posibilidad de perder parte de su dinero; mientras que la segunda definición más elegida, con un 43%, ha sido la pérdida total del mismo”.