Esta situación refleja la persistente desconfianza entre las entidades, que prefieren salvaguardar sus recursos en la 'hucha' de la institución emisora antes que buscar mayores rendimientos mediante inversiones y la concesión de préstamos.
En concreto, los datos del BCE actualizados a 8 de enero superan los 455.299 millones de euros del anterior récord, establecido el pasado jueves 5 de enero. De hecho, en las escasas jornadas hábiles de 2012, la cifra de depósitos se ha mantenido holgadamente por encima de los 400.000 millones, una cifra muy superior a la habitual.
La facilidad de depósito del BCE remunera el dinero depositado diariamente por los bancos de la eurozona al 0,25%, una rentabilidad muy inferior al 1% del precio oficial del dinero, lo que constata la escasa predisposición de los bancos a prestarse entre ellos al optar por la mayor seguridad del banco central en vez de buscar mayores rendimientos.