La sostenibilidad se está convirtiendo en un tema estratégico desde que es comprobable que incorporar criterios medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG) a la hora de invertir “es un motor para la creación de valor a largo plazo”, como afirma la directora de Inversión en Sostenibilidad e Integración de Criterios ASG de Robeco, Masja Zandbergen.
Robeco, empresa de gestión de activos holandesa cuya filial RobecoSAM elabora el índice Dow Jones de Sostenibilidad (DJSI), ha presentado el manual ‘El Gran Libro de la Inversión Sosenible’, disponible a partir de septiembre, en el que pone de manifiesto su visión de este enfoque de la inversión que “aplica en todos sus fondos”, explica Zandbergen.
Amadeus, Naturgy (Gas Natural), Red Eléctrica, Enagas o Inditex estaban incluidos a principio de año en el DJSI. Se trata de la representación española de este tipo de compañías que han comprobado que dejar que sus inversores les exijan cada vez más que cumplan con criterios ESG es más rentable a medio- largo plazo. En este sentido, la responsable de Robeco para España y Chile, Ana Claver, lamenta que, por lo general, la cultura de la inversión en España tiende a ser cortoplacista.
Mejorar la conducta de las empresas produce mejores rendimientos para la compañía y “beneficios para la sociedad”, afirma Zandbergen que lo corrobora con datos: el 80 % de unos 200 estudios consultados por Robeco coincide en que los accionistas de empresas sostenibles reciben mayores retornos de inversión, el 88 % que estas corporaciones obtienen un mejor rendimiento y el 90 % que éstas presentan menos riesgos financieros.
Fuente: Robeco
También la volatilidad del mercado actual está ayudando. “Personalmente –dice Zandbergen- en un mundo volátil donde los mercados están comportándose de forma impredecible, invertir en compañías que integran las métricas de ASG es más seguro”.
Megatendencias: Ciberseguridad y desigualdad, los mayores retos
Según explica la directora de Inversión en Sostenibilidad e Integración de Criterios ASG, los retos que más están influyendo en la agenda de las compañías, junto con la crisis climática, son la ciberseguridad y la desigualdad que, “aunque está disminuyendo entre los diferentes países, se observa que aumenta a nivel interno.