¿Cuál es la visión a largo plazo de la compañía, de cara los próximos 3-5 años, y cómo piensa conseguir esos objetivos?
A casi 30 años de su fundación, LLYC sigue firme en su visión a largo plazo: ser el socio estratégico de referencia para empresas que buscan potenciar y proteger el valor de sus negocios y marcas. Este compromiso se refleja en los avances del plan estratégico 2023-2025, que ya en su segundo año muestra logros significativos en áreas clave de crecimiento.
Hemos fortalecido nuestros servicios de marketing, creatividad y análisis de datos, además de expandir nuestras capacidades en asuntos corporativos con la incorporación de ZEUS by LLYC. También hemos cumplido con hitos importantes en nuestra expansión geográfica, especialmente en Estados Unidos, un mercado prioritario para nuestro plan, donde sumamos a Lambert by LLYC como parte del grupo. Además, la reciente apertura de nuestra oficina en Bruselas completa nuestra oferta para clientes que requieren soluciones en el ámbito de los asuntos europeos.
¿Cómo se adapta a los cambios del mercado y las condiciones competitivas?
Nuestro sector está en un momento importante de transformación y de eliminación de fronteras entre disciplinas que antes estaban aparentemente muy separadas en el ámbito del marketing o la comunicación. El mercado ha validado en los últimos años la ampliación de nuestra oferta en ámbitos en los que hace unos años no estábamos, como demuestra la incorporación de Vodafone, Turespaña o IFEMA Madrid, que son clientes de diferentes soluciones integradas de marketing, comunicación y asuntos públicos. Esta adaptación sólo es posible contando con profesionales de primera línea y muy diversos, que están en LLYC tanto por el crecimiento del equipo interno como por las incorporaciones provenientes de las compañías que hemos integrado.
¿Cómo gestiona los riesgos y las oportunidades?
Nuestro trabajo siempre tiene que ver con un riesgo o una oportunidad, la verdad. Y creo que somos especialmente buenos y aportamos un valor diferencial cuando esos riesgos u oportunidades son muy relevantes para el negocio de una compañía. Nos obliga a ser más innovadores y creativos, a responder con buenas ideas y a usar de forma inteligente la tecnología, para que esas propuestas estén basadas en datos y no solamente en intuición o experiencia. Si conseguimos unir todo eso, los frutos suelen ser muy buenos y nuestros clientes siguen con nosotros cada vez en más ámbitos.
Los clientes valoran especialmente la amplitud de nuestra mirada cuando nos cuentan sus desafíos y saben que proponemos lo que mejor puede funcionar. Es una ventaja frente a algunos competidores que, siendo muy buenos profesionales, responden con una mirada única porque son especialistas en una u otra técnica concreta.
Desafíos y Oportunidades
¿Cuáles son los mayores desafíos que enfrenta actualmente la compañía?
Estamos en una transformación importante este año, que ya está dando frutos, como decíamos antes, en algunas “ligas” en las que hace un tiempo no éramos líderes o referentes. El principal desafío sigue siendo atraer y mantener la confianza de las empresas que nos contratan. Nuestra facturación ya proviene en un 40-50% (según mercados) de soluciones de marketing, con el mismo nivel de calidad, creatividad y tecnología que el resto de nuestras capacidades en comunicación y asuntos públicos. Por eso reitero la necesidad de tener a los mejores en cada campo. Este sería el otro gran desafío: contar con los mejores si queremos ser los mejores en lo que hacemos.
¿Cómo aprendió de los fracasos (si es que los ha sufrido)?
Muchas cosas no han salido tan bien como esperábamos, claro. En esas ocasiones, me gusta más hablar de reacción que de aprendizajes, porque casi todo se puede arreglar si se reacciona rápido y de manera inteligente. Algunos errores provienen de querer hacer muchas cosas al mismo tiempo y de hacer cosas nuevas todo el rato, pero es un camino imprescindible para construir una organización innovadora, ágil y mejor preparada cada día.
Liderazgo e innovación
¿Cómo fomenta una cultura de innovación dentro de la empresa?
Debo reconocer que esto lo he tenido relativamente fácil, porque la innovación ha sido una obsesión permanente desde la fundación de la compañía y está en el objetivo casi diario de todos los socios. Nuestra receta es una mezcla de apertura mental con dedicación disciplinada de recursos a pensar e innovar. Un ejemplo es la aplicación de IA a nuestra profesión. A algunos les cuesta creer que hace ya 15 años empezamos esa tarea, con avances que hoy nos permiten hablar de modelos de medición propios que mejoran en acierto a otros grandes referentes mundiales en cuanto a detección de sentimiento. El que tenemos para predecir la polaridad reputacional supera en más de 20 puntos la precisión de las principales herramientas del mercado, según lo auditado por la UCM (Universidad Complutense de Madrid).
La llegada a nuevos mercados o disciplinas, por nuestro crecimiento orgánico o inorgánico, también obliga a nuestros profesionales a aprender e innovar, como ocurre en los últimos meses en data management y data visualization desde la adquisición de Zeus, por ejemplo.
¿Cómo asegura que su equipo ejecutivo esté alineado con la visión y objetivos de LLYC?
Como decíamos antes, necesitamos tener a los mejores en el equipo. Nuestra manera de conseguirlo es ofrecer crecimiento profesional, que resulta en crecimiento de la compañía y a su vez permite el crecimiento individual. Esa visión es la que, en mi opinión, mejor alinea al equipo, motiva a estar más cerca de los clientes y, por tanto, avanzar hacia el objetivo común.
¿Qué cualidades busca en los miembros de su equipo de liderazgo?
Más allá del nivel profesional, con el que somos muy exigentes, busco trabajar con buenas personas y que tengan dos ingredientes que son marca de la casa: generosidad y curiosidad. Normalmente trabajamos en proyectos muy complejos, y los líderes de un equipo de alto rendimiento no pueden ser sólo grandes técnicos en lo suyo, sino directores de orquesta, porque tenemos grandes solistas y hay que conseguir que el resultado suene perfecto.
¿Qué papel juega la innovación en sus planes de desarrollo?
No es casual que en el Plan Estratégico 2023-25 decidiéramos destinar el mayor presupuesto de nuestra historia a innovación. Actualmente estamos dedicando entre 1,2 y 1,5 millones de euros anuales a desarrollar nuevas formas de trabajar. Esto es posible porque tenemos un equipo con más de 80 ingenieros dedicados a mejorar la forma en que todos los demás afrontan su trabajo.
¿Puede describir un proyecto innovador reciente y su impacto en la empresa?
Me hace especial ilusión contar un proyecto en el que estamos embarcados ahora mismo. Desde LLYC estamos trabajando con Red.es, entidad adscrita al ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, y la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) en el lanzamiento de ODESIA (Observatorio del Desarrollo del Español en la Inteligencia Artificial). Este proyecto tiene el objetivo de evaluar y comparar el grado de desarrollo de la IA en español e inglés, lo que permitirá identificar las brechas existentes entre ambos idiomas y promover programas específicos para potenciar el avance del español en la IA.
El estudio se ha dividido en cuatro áreas principales: el estado actual de la IA en ambos idiomas, las soluciones tecnológicas disponibles, el nivel de adopción de estas tecnologías y la experiencia de los usuarios. Los resultados ofrecerán un panorama claro sobre las diferencias y oportunidades entre ambos idiomas en el campo de la IA. Por el momento, y hasta ahí puedo contar ahora, está poniendo en evidencia una brecha considerable en el desarrollo de la inteligencia artificial entre ambos idiomas. Eso resalta la necesidad urgente de acciones que impulsen el avance del español en este ámbito.
¿Cómo integra la responsabilidad social en sus planes de desarrollo empresarial?
En LLYC estamos comprometidos con la gestión de la Sostenibilidad y los criterios ESG, como un actor empresarial consciente de su responsabilidad con sus diferentes stakeholders. A partir de nuestra Política de Sostenibilidad, nos encontramos trabajando desde tres frentes: Sostenibilidad Ambiental, Contribución Social y Gobierno Corporativo.
En 2023 LLYC ha sido calificada por dos ratings ESG: Clarity Ai y Refinitiv, con calificaciones que nos permiten liderar nuestra categoría de empresas comparables y estar por encima de nuestros peers.
Desde un enfoque más personal...
¿Qué libros, artículos o líderes le han inspirado en su carrera?
Ha habido muchos libros, claro, pero mirando en perspectiva destacaría tres: El Octavo Sentido, de José Antonio Llorente, que lo he vuelto a leer este año y Comusicación, de Adolfo Corujo, que resumen bien mucho de nuestro ADN y por último A Sense of Urgency de John P. Kotter, que marca mucho nuestro estilo y es una gran referencia para mí sobre cómo movilizar a los equipos en un entorno que cambia constantemente.
¿Qué consejo le daría a los futuros líderes empresariales?
Aconsejar es fácil, pero lo difícil es ser honesto y dar ejemplo. Así que esa es la recomendación que doy cuando me preguntan algo así, tanto a líderes como a cualquier ejecutivo que quiera seguir creciendo.
¿Cómo logra equilibrar su vida profesional y personal?
No creo que sean dos vidas separadas. Tengo la suerte de que me encante mi trabajo. Lo cierto es que siempre hemos pensado que la flexibilidad era buena para ser un lugar al que quieran venir a trabajar (y luego se queden) los mejores, porque es compatible con la exigencia de altos resultados.
Además, disfruto mucho de sentarme con colegas y clientes para compartir ideas y reflexionar sobre el negocio, lo que me ayuda a ver las cosas desde nuevas perspectivas y regresar al trabajo con una visión más fresca.
¿Qué legado quiere dejar en LLYC?
Nuestro legado es el legado de José Antonio Llorente, que es para lo que seguimos trabajando: ser un proyecto que crece para permitir a otros crecer. Queremos seguir siendo los mejores en lo que hacemos y tener a los mejores al lado, así que tenemos mucha tarea.