Este martes tendrá lugar en Londres una reunión de los embajadores de la UE en la que se espera que la primera ministra británica, Theresa May concrete su estrategia sobre el Brexit. Se teme que la dirigente marque una senda más proclive al “Brexit duro, que a la negociación amistosa, inclinándose por abandonar el mercado único y la unión aduanera
. ¿Qué pasará entonces con la bolsa británica? El devenir es incierto, lo único que sabemos es que  desde el 24 de junio la bolsa londinense ha subido como la espuma y ha acelerado esta revalorización en las últimas semanas al calor de las declaraciones de May mostrando su inclinación a un hard Brexit. De hecho, el FTSE-100 ha acumulado catorce sesiones consecutivas cerrando en verde y marcando nuevos máximos históricos sin parar, lo que ha disparado su RSI hasta niveles de sobrecompra insospechados (84 puntos).
 
Así pues, el selectivo se ha revalorizado un 16% desde finales de junio, mientras que la libra ha caído en igual porcentaje. No es de extrañar esta correlación inversa si observamos que las acciones que más tirón han dado al índice han sido precisamente las exportadoras (que exportan más barato por la libra débil) y las empresas de materias primas (que cotizan en libras pero dan resultados en dólares, lo que mejora su PER).
 
Por otro lado,
conviene recordar que sólo el 26% de los ingresos de las 100 empresas que cotizan en el FTSE provienen de Reino Unido, por lo que la ralentización de la economía británica tras el Brexit apenas impacta en sus cuentas. En cambio, tienen más que ganar con la depreciación de la libra, que hace más competitivas sus exportaciones y, al cambio, sube los beneficios producidos en otros países.
 
EVOLUCIÓN FTSE-100 vs EURGBP


Con todo ello, observamos que desde el 24 de junio el top 10 de las empresas más alcistas del índice está compuesto por exportadoras y energéticas. Por ejemplo, lidera el ranking la compañía biotecnológica Convatec, que ha duplicado su precio en este tiemplo, mientras que las cinco siguientes posiciones son para empresas de materias primas y energía, como Glencore (52%), Anglo American (49%), BHP Billiton (41%), Antofagasta (40%) y Río Tinto (39%). Por debajo ya encontramos a la compañía de alquiler de equipos industriales Ashtead Group (36%) y, (¡atención!) un banco, HSBC (33%). Cerrando el círculo está la textil Burberry (32%).

Para Compañías como Convatec, Ashtead y Burberry el desplome de la libra esterlina ha sacado brillo a sus exportaciones. Si bien es cierto que a Convatec también le ha ayudado a escalar el reciente anuncio de la compra de la holandesa EuroTec por 25 millones de euros, pero en esencia Convatec se ha beneficiado del abaratamiento de la divisa británica que favorece las ventas de producto a otras regiones, no obstante, desde la compañía (que exporta también desde Suiza y EEUU) reconocen que el Brexit supone un riesgo para ellos y se plantear reorganizar sus canales de fabricación y distribución para evitar aranceles en caso de que a Reino Unido se le niegue el acceso al mercado único.
 
Ashtead, en cambio, considera que el Brexit no tendrá impacto en sus cuentas, pese a que Reino Unido aporta un 14% de los ingresos y un 10% de los beneficios subyacentes. De hecho, reconoce que la debilidad de la libra ha mejorado el valor de los ingresos y beneficios denominados en dólares.
 
Burberry, la icónica marca británica de artículos de lujo, no está tan preocupada por el Brexit, pues, como otras compañías del sector, está dando más peso a las ventas internacionales y online, mientras que la región que más le preocupa es China, ya que una tercera parte de sus beneficios proviene del país asiático
 
Pese a la caída de la libra y la rebaja de tipos en Reino Unido, HSBC ha sido una de las mejores acciones del FTSE-100 en este tiempo y, además, desde Citi Research consideran que aún tiene recorrido. De hecho, está entre su lista de bancos británicos favoritos, dándole un potencial del 5% de subida. (Ver: Los bancos se preparan para un Brexit duro)