La moneda digital descentralizada ha podido capear la situación desatada por Silicon Valley Bank (SVB) a diferencia de otros momentos recientes de caídas en las bolsas como los vistos a lo largo de 2022. La comunidad inversora pudo comprobar el pasado año que el bitcoin tiene una gran correlación con el sector tecnológico estadounidense y está lejos de ser un activo refugio. Muchas tendencias como el metaverso o la inteligencia artificial se desarrollan a través de este tipo de compañías.
Las subidas de tipos de interés de los bancos centrales también penalizan especialmente a los activos más caros como son las acciones de las compañías tecnológicas, ya que los descuentos de los flujos de caja se ven alterados por el aumento de los costes financieros. Al bitcoin, como activo correlacionado con la tecnología, tampoco le va especialmente bien un escenario de endurecimiento monetario.
El año pasado, además, el mercado cripto tuvo que hacer frente a escándalos propios como la caída de Luna, la pérdida del anclaje de la moneda estable tether (USDT) al dólar estadodunidense, la bancarrota del broker FTX y otras plataformas menos conocidas como Genesis, Three Arrows Capital, Celsius Network, Voyager Digital, la plataforma de préstamos de criptomonedas BlockFi o la compañía minera Core Scientific.
En los últimos días, sin embargo, el bitcoin ha tenido un fuerte desempeño tras el descenso que se vio el viernes cuando la criptodivisa perdió los 20.000 dólares al hundirse Silvergate Bank y Signature Bank.
“El sábado vimos alzas en el bitcoin, pero fue el domingo cuando las compras se aceleraron después de que la Reserva Federal anunciase una inyección masiva de liquidez en el sistema bancario, mientras que la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) y la Comisión de Negociación de Futuros de Productos Básicos de Estados Unidos (CFTC, por sus siglas en inglés) emitieron un comunicado conjunto diciendo que estaban monitoreando de cerca la situación y que tomarían las medidas apropiadas para garantizar la estabilidad en los mercados”, sostiene Diego Morín, analista de IG.
Tras el acuerdo de los principales bancos centrales del mundo para asegurar la liquidez necesaria y contener posibles contagios para que no se vuelvan a repetir situaciones como la de Silicon Valley Bank (SVB) o la de Credit Suisse, el apetito por los activos de riesgo se recupera paulatinamente esta semana.
Desde IG también sostienen que una nueva ralentización en el dato de inflación podría consolidar al mercado de las criptomonedas. Una moderación en el aumento de los precios haría que las subidas de tipos fueran algo menos agresivas e incluso el mercado hiciera proyecciones con potenciales bajadas del coste del dinero.
“Se espera que la tasa de inflación en febrero en EEUU se sitúe en el 6%, lo que se traduciría en el octavo mes consecutivo de ralentización. Si a esto le sumamos las apuestas que están haciendo los analistas de las principales firmas de inversión sobre el freno de la Fed en las subidas de tipos por la crisis bancaria, podríamos tener un catalizador para que el precio de las criptomonedas se consolide”, indica Morín.
Análisis técnico del bitcoin
La principal criptodivisa llegó en agosto del pasado año hasta los 25,250 dólares, posteriormente volvió a su tendencia bajista principal para caer al entorno de los 15.480 dólares en noviembre del mismo año. Desde entonces, el bitcoin recupera con fuerza y ataca, de nuevo, la parte alta del rango lateral.
“Los 25.250 dólares se antojan un nivel clave, su superación podría ser la confirmación de un suelo de mercado en el mercado de las criptos, un cierre diario por encima de dicho nivel activaría un objetivo teórico alcista por segundo impulso hasta los 29.360 dólares y a su vez activaría otro objetivo teórico más alto por ruptura de rango lateral hasta los 35. 000 dólares”, subraya Morín.
Niveles similares ve también el analista independiente Roberto Moro. “El bitcoin ha roto una resistencia enorme en la zona de 24.800 dólares, lo cual da pie a pensar en la siguiente resistencia en los 29.600 dólares. Ahora mismo comprar es complicado, pero si es capaz de superar la zona de los 30.000 dólares se le abre un camino muy limpio hacia lo que es el primero de los niveles de corrección proporcional de toda la caída desde los máximos históricos, es decir, la zona de 35.900 dólares, pero para ello tiene que romper por encima de 30.000 dólares”, comenta Moro.
“Es cierto que el escenario de bitcoin hasta ahora era muy bajista. Este escenario no lo podemos dar por finalizado y es normal que el rebote sea muy importante, pero no diría que esto supone un cambio de tendencia, sí para el corto y medio plazo, pero no para el largo plazo”, añade.
Para aquellos que no quieran invertir directamente en las criptodivisas, también existe la posibilidad de hacerlo a través de las acciones de plataformas o brókers especializados en este tipo de activos. Coinbase se impulsa más incluso que el bitcoin: en los últimos cinco días se revaloriza un 28,4%, en el último mes un 35,1% y en lo que va de año un 145,8%.