En un entorno donde uno de los trending topics en inversiones la movilidad ecológica y por tanto los coches eléctricos, donde Tesla sigue acaparando titulares con un incremento en cuota de mercado de los coches eléctricos. Ahora queda por ver si Tesla consigue sacar un coche autónomo efectivo en donde el margen bruto pasa de los 20% actuales a los casi 80%. Pero habrá que esperar a que esto suceda…
No cabe duda que la penetración de los vehículos eléctricos alcanza niveles sin precedentes, a velocidades de vértigo, como ya lo mostraba la nota publicada hace unos días: “Los coches eléctricos en la autopista del éxito según Capital Group”.
El soporte a esta “temática” está en las preferencias del consumidor, precios unitarios cada vez más competitivos y una perspectiva regulatoria de apoyo. El aumento de la demanda hace que se aceleren la escala de producción y a su vez reducir los costes para hacer que los consumidores se inclinen cada vez más por estos vehículos. Si bien, el primer impulso vino por una preocupación medioambiental que llevó a un impuesto (justo o injusto) al gasóleo en España, ha habido subsidios en el impuesto de matriculación y en impuesto de circulación, que hacen a muchos consumidores a replantear la compra de un coche eléctrico. Es de esperar que la penetración global de los coches eléctricos se acelere de manera significativa en las próximas decadas:
No obstante, la transición de los automóviles convencionales a los eléctricos se está acelerando, lo que afecta directamente a los fabricantes de autos y proveedores de autopartes, pero como la industria del automóvil es tan grande, influye en sectores “satélites” que, aunque no aparezcan tan fascinantes como TSLA, ofrecen jugosos resultados a los inversores.
Hoy nos enfocaremos al sector de minería, aunque pronto lo haremos a otros sectores que también se ven favorecidos. Nos referimos al sector de minería de tierras raras, que se ha visto favorecido de la avalancha de flujos de inversión destinados al sector automotriz y temas de inversión ambiental, social y de gobernanza.
Los elementos de tierras raras y otros metales estratégicos han tenido un papel importante en la vida cotidiano por muchos años, y van desde el desarrollo de baterías recargables en los 70’s, hasta el debut del primer iPhone en 2008… Las tierras raras han sido piezas clave en los avances tecnológicos.
El término “tierras raras”, o REE del inglés, se refiere a 17 elementos metálicos ubicados en el medio de la tabla periódica. Geológicamente hablando, los REE no son especialmente raros ya que los depósitos se encuentran en todo el mundo, pero su “rareza” proviene del hecho de que nunca se encuentran en altas concentraciones y generalmente se mezclan entre sí o con elementos radiactivos. Sus cualidades han hecho de la minería de tierras raras una industria difícil de penetrar, y solo un pequeño número de empresas se han establecido en el campo en los últimos años, y la mayoría de ellas chinas.
Los llamados metales de tierras raras se incorporan en nuevas tecnologías, desde baterías de iones de litio hasta vehículos eléctricos, turbinas eólicas y sistemas de guía de misiles. También hay una oferta mundial limitada, ya que solo un puñado de productores a nivel mundial producen los metales. China controla la mayor parte de la producción y la capacidad del sector.
Según el informe de IDTechEx “Materiales para vehículos eléctricos 2020-2030”, en los últimos añoñs ha habido un cambio hacia motores más basados en imanes permanentes (como los que se encuentran en REE). Los motores con estos imanes permanentes suelen tener una mejor eficiencia durante la conducción, razón por la que Tesla ha hecho la transición de motores de inducción de cobre en el Modelo S y X a usar un motor de imán permanente.
Hace unos días, el analista de Morgan Stanley Carlos de Alba comentaba acerca del fuerte impulso que están teniendo los productores de tierras raras, especialmente con la administración de Biden, apuntando a un futuro de cero emisiones y más dependientes de las alternativas de energía limpia.
El analista comenzó la cobertura de MP Materials, la mayor minera de tierras raras con sede en Estados Unidos, cuyo precio se han cuadruplicado desde que Joe Biden ganó las elecciones hace cuatro meses. MP es "una alternativa para acelerar la adopción de vehículos eléctricos y las tendencias de electrificación en las turbinas eólicas", según el informe del analista de Morgan Stanley. El analista establecía un precio objetivo de 57 USD, lo que implica un alza del 32%.
A diferencia de muchas materias primas, las tierras raras no tienen futuros negociados, por lo que la oportunidad de inversión radica principalmente en las empresas que extraen y refinan los materiales. VanEck vectors Rare Earth / Strategic Metals ETF (REMX) ofrece una singular oportunidad a los inversores para tener exposición a estas empresas en todo el mundo e invertir en el futuro de la innovación tecnológica y ambiental.
Según los últimos datos disponible, el fondo cuenta con casi 680 millones de dólares de activos, se lanzó el octubre de 210, tiene una fuerte exposición a China (casi el 50%) lo que explica que entre sus 10 principales apuestas se abunden empresas de este país:
La rentabilidad alcanzada en el último año ha sido de triple dígito, como se observa a continuación. Pero dada la penetración esperada de los vehículos eléctricos, mantiene potencial de alza significativo.