La evolución del mercado laboral es uno de los indicadores que más observan los analistas de cara a la decisión que tome la Reserva Federal en los próximos meses de comenzar a retirar los estímulos monetarios.
De hecho, aunque en julio la tasa de paro cayó hasta el 7,4% de la población activa –frente al 7,7% del mes anterior-, la cifra sigue siendo extremadamente elevada tanto para el gobierno, como para la Reserva Federal.
A finales de la semana pasada había caído en 14.000 personas el número de personas que recibían subsidios de desempleo, hasta 2,99 millones.