“Todas las medidas juntas deben apoyar los préstamos a la economía real, apoyar la recuperación económica y, por lo tanto, conducir la tasa de inflación hacia niveles más cercanos al 2%”, Praet ha afirmado en un discurso hoy en París. No obstante, ha reconocido que las medidas “tardarán su tiempo” en tener un impacto sobre la economía.
Asimismo, Praet ha señalado que el BCE es consciente de los posibles riesgos a la estabilidad financiera, pero ha insistido en las medidas están estructuradas para evitar tanto el retraso en la reparación de los balances de los bancos como la creación de burbujas en los precios de activos. En concreto, Praet ha explicado que los bancos no pueden beneficiarse de la financiación de las TLTROs (las operaciones condicionadas de refinanciación a largo plazo) si no han realizado las reparaciones necesarias a sus balances.
Asimismo, Praet ha señalado que las TLTROs excluyen explícitamente los préstamos a particulares para la compra de viviendas. “Por lo tanto, la preocupación de que la medida podría causar una burbuja inmobiliaria parece injustificada”, Praet ha concluido.
J.M.