En esta mesa redonda titulada “El Empleo en la transición energética” organizada por Estrategias de Inversión y presentada por Laura Guzmán, hemos analizado el impacto de la transición energética en el empleo con Eva Buch, responsable de educación y divulgación de Fundación Naturgy; Begoña María- Tome Gil, coordinadora de proyectos en zonas de Transición Justa e Ignacio Baratech, responsable de relaciones institucionales de la Plataforma por el Empleo Verde.

La transición energética presenta una oportunidad única para aumentar la participación de las mujeres en el sector laboral. En el año 2022, se observó que cuatro de cada diez empleos nuevos generados en este sector estaban ocupados por mujeres. Sin embargo, la mayoría de estas posiciones son administrativas.

La clave está en fomentar la presencia de mujeres en roles técnicos y de liderazgo. Organizaciones, como la Fundación Naturgy, trabajan para cerrar esta brecha de género. Eva Buch, responsable de Educación y Divulgación de la fundación, ha recordado que es “esencial no solo fomentar la equidad de género, sino también ofrecer programas de formación que capaciten a las mujeres para roles técnicos en el sector energético”. 

Desde el Instituto para la Transición Justa se están implementando medidas que buscan no solo aumentar la participación de las mujeres, sino también garantizar que las nuevas oportunidades de empleo sean de calidad y bien remuneradas. Begoña María-Tomejil, coordinadora de proyectos en este organismo, ha destacado que la inclusión de las mujeres en el sector energético es una cuestión de derechos humanos y una necesidad para el desarrollo sostenible.

A pesar de los avances, todavía existen desafíos significativos en la inclusión de mujeres en el sector energético. En muchos sectores tradicionales sigue dominando la presencia masculina. Ignacio Barates, responsable de Relaciones Institucionales de la Plataforma por el Empleo Verde, ha mencionado que solo un 11% de las trabajadoras están en el sector de la construcción, lo que refleja la necesidad de cambiar estereotipos y promover un ambiente laboral inclusivo.

El futuro del empleo en la transición energética

Mirando hacia el futuro, es evidente que la transición energética traerá consigo un aumento en la creación de empleos. Sin embargo, para que esto sea una realidad inclusiva, es fundamental que todos los actores involucrados —gobiernos, empresas y organizaciones— trabajen juntos para eliminar las barreras y promover la igualdad de oportunidades. Para Eva Buch es fundamental “visibilizar, encontrar referentes y la formación”.

De hecho, los tres ponentes han coincidido en que la educación es un pilar fundamental para garantizar que las mujeres puedan acceder a los empleos del futuro. La creación de programas de formación específicos, así como la promoción de modelos a seguir, son pasos fundamentales para superar estos obstáculos. También Ignacio Baratech ha subrayado “ la importancia de ir de la mano de las empresas para diseñar sus programas en base a la necesidad real de las empresas. Esto es parte del éxito de nuestros programas”.

Además, el Gobierno español está impulsando políticas que integran la dimensión de género en proyectos de energía renovable. Esto incluye la evaluación de impacto de género en proyectos financiados, asegurando que las mujeres tengan acceso a las oportunidades laborales que surgen de la transición energética. Un modelo, subraya Begoña María-Tomejil,  cuyo objetivo es  “una mayor integración, mayor democratización, mayor participación social y mayor participación de empresas que persiguen los principios rectores de la igualdad”.

En conclusión, la transición energética ofrece un camino hacia un futuro laboral más inclusivo y sostenible. Debemos aunar los esfuerzos en educación,  formación y visibilidad de las mujeres en el sector para asegurar que todas las personas tengan la oportunidad de contribuir a este cambio necesario y beneficioso para el conjunto de la sociedad.