Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la reforma del sistema de pensiones en España entre 2021 y 2023 supondrá un mayor incremento de los gastos que el crecimiento esperado de los ingresos. Esto ha sido advertido por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), que estima un aumento del déficit de 1,1 puntos porcentuales para 2050.
La última reforma de pensiones en España tiene como objetivo reducir los futuros déficits de pensiones mediante el aumento de ingresos adicionales. Se busca mejorar la protección de los pensionados de bajos ingresos y de las personas con carreras irregulares.
La reforma española se basa en contribuciones más altas, especialmente por parte de las personas con mayores ingresos. Sin embargo, esta medida solo se compensa en pequeña medida con el aumento de las pensiones, que se utilizarán para mejorar las finanzas de las pensiones y construir el fondo de reserva.
Según los cálculos de la AIReF, se estima que las medidas de la reforma, junto con una reforma de las cotizaciones de los autónomos, generarán ingresos anuales equivalentes al 1,3% del PIB en 2050. Sin embargo, la OCDE advierte que estos ingresos adicionales solo cubren parcialmente los crecientes gastos derivados principalmente de la reintroducción de la indexación. Se espera que los gastos anuales aumenten un 2,4% del PIB, lo que resultará en un incremento previsto del déficit del 1,1% del PIB en 2050.
La ampliación del período de cotización de referencia para calcular las pensiones ha sido una demanda clave de la Comisión Europea. Sin embargo, la OCDE señala que España optó por una pequeña extensión y un largo período de transición con impactos "poco claros". Desde 2022, el período de cotización de referencia son los últimos 25 años, que se incrementó respecto de los últimos 15 años en 2013. Con la reforma, estos pasarán a ser los mejores 27 de los últimos 29 años de carrera para las personas que se jubilen a partir de 2044. Hasta entonces, las personas pueden elegir el método de cálculo más beneficioso, lo que significa que hasta 2044 este cambio solo aumentará los beneficios y los gastos.
En resumen, la OCDE destaca que la reforma del sistema de pensiones en España generará mayores gastos que ingresos, a pesar de las contribuciones más altas. Los ingresos adicionales no serán suficientes para cubrir los crecientes gastos y se espera un aumento del déficit en el futuro. Además, se señala que España sigue siendo uno de los pocos países de la OCDE que no utiliza el conjunto de la vida laboral de los ciudadanos para calcular las pensiones.