El repunte de la producción industrial en marzo fue consecuencia, por su mayor repercusión en el índice, del incremento de la producción de los bienes de consumo no duradero (+10,1%) y de los bienes intermedios (+8,2%). En ambos casos, la mayor parte de las actividades que componen sus respectivos sectores elevaron su producción en el tercer mes del año.
También el sector de la energía incrementó su producción en marzo, con una tasa interanual positiva del 7,1%. Los bienes de consumo duradero fueron los únicos que tuvieron una repercusión negativa sobre el IPI, al registrar un descenso interanual del 2,6%, destacando la contracción experimentada por la fabricación de muebles (-10,4%).
En concreto, la producción de bienes de consumo duradero se contrajo una media del 11,8% hasta marzo; la de los bienes de equipo bajó un 2,7%) y la de la energía retrocedió un 1%. Por el contrario, los bienes intermedios y los bienes de consumo no duraderos crecieron a tasas positivas en el primer trimestre, con avances medios del 2,2% y del 1,8%, respectivamente.
CASI TODAS LAS COMUNIDADES EN POSITIVO
Por comunidades autónomas, la producción industrial experimentó en marzo crecimientos interanuales en catorce de ellas y tan sólo bajó en tres. Extremadura fue la que registró el mayor repunte, con una tasa del 23,8%, seguida de Navarra (+16,7%) y Castilla y León (+14,2%).
En el lado de los descensos, en marzo se registraron caídas de la producción industrial en Aragón (-5,8%) y Baleares y Murcia (-0,6% en ambos casos).