Las asociaciones empresariales de alquiler de vehículos con y sin conductor Aseval, Unauto y Feneval se pondrán en contacto con la Comisión Europea la próxima semana para instar a las comunidades autónomas a regular la actividad de las VTC antes de octubre.
Ese mes, según el decreto que aprobó el exministro de Transportes José Luis Ábalos, este tipo de vehículos no podrá prestar servicio en los núcleos urbanos, a no ser que cada comunidad cree autorizaciones para que sí lo puedan hacer, como ya ha hecho la Comunidad de Madrid.
Esta decisión en la región madrileña ha despertado las quejas de los taxistas, que esta semana se han manifestado en la capital española y ya han anunciado que llevarán a los tribunales la ley aprobada en Madrid, con los votos a favor del PP, la abstención de Vox y el 'no' de la izquierda.
Ahora, el sector del VTC ha reaccionado y defenderá en Bruselas su posición, al considerar que las restricciones a su actividad, tal y como estarían planteando comunidades como Cataluña, Comunidad Valenciana o Baleares, serían "desproporcionadas y contrarias a las libertades de los tratados europeos".
"Nos pondremos la semana que viene en contacto con la Comisión, para informarle de la situación y solicitarle que tome cartas en el asunto, para evitar la pérdida de miles de empleos y la desaparición de un servicio urbano que demandan millones de españoles", han señalado los presidentes de Aseval-Madrid, Ignacio Manzano, y de Unauto, José Manuel Berzal, en un comunicado.
Asimismo, han celebrado la aprobación en Madrid de esta nueva regulación, asegurando que evita la desaparición de más de 13.000 empleos en la región, y que "apuesta por la convivencia con el sector del taxi, en línea con las recomendaciones de la Comisión Europa".