La Corte Suprema de Estados Unidos ha dejado intactas las resoluciones que pueden forzar a Argentina a pagar miles de millones de dólares a los tenedores de bonos que no entraron en los canjes de 2005 y 2010. La Justicia norteamericana rechaza así la apelación del país latinoamericano en un caso que ha desestabilizado a los mercados financieros y ha provocado la amenaza de un nuevo default.
En concreto, Argentina tendrá que pagar aproximadamente 1.330 millones de dólares en el caso de los llamados holdouts, “fondos buitre” que representan cerca de un 7% de sus acreedores.
La presidenta del país, Cristina Fernández de Kirchner había adelantado que una decisión en este sentido por parte de la Justicia estadounidense podría forzar a la nación a caer de nuevo en una cesación de pagos.
Y es que, aunque Argentina actualmente cuenta con fondos para hacer frente a este pago, hacerlo podría abrir la puerta a posibles demandas que en el futuro no podría pagar.
S.C.