En marzo, la tasa de inflación de la zona euro se ubicó en el 2,4% interanual, mostrando un descenso de dos décimas con respecto al mes anterior, según los datos proporcionados por Eurostat. Esta cifra representa el menor incremento del coste de la vida en la región desde noviembre del año anterior, cuando se registraron mínimos desde el verano de 2021. Aunque el mercado estará esperando los datos de los próximos meses para ver el comportamiento de la inflación tras las subidas del precio del petróleo por encima de los 80 dólares el barril.
En el contexto de la Unión Europea, la tasa de inflación interanual también experimentó una moderación en marzo, situándose en el 2,6%, frente al 2,8% de febrero. Esta disminución marca el menor aumento de los precios entre los Veintisiete desde julio de 2021.
Entre los países de la UE, se destacan las menores lecturas interanuales de inflación en marzo correspondientes a Lituania (0,4%), Finlandia (0,6%) y Dinamarca (0,8%). En contraste, las subidas de precios más intensas se registraron en Rumanía (6,7%), Croacia (4,9%), Estonia y Austria (ambos 4,1%).
En el caso específico de España, la tasa de inflación armonizada alcanzó el 3,3% en marzo desde el 2,9% de febrero, ampliando a nueve décimas el diferencial desfavorable respecto del promedio de la eurozona. Unos malos datos que hace que España sea uno de los países más necesitados de una bajada de tipos contrarrestar estos efectos en las familias y empresas.
En la zona euro, se observa que la caída interanual de los precios de la energía se moderó al 1,8% en marzo desde la bajada del 3,7% en febrero. Por otro lado, los alimentos frescos se abarataron un 0,5%, después de registrar un incremento del 2,1% en el mes previo.
En cuanto al coste de los servicios, este continúa aumentando anualmente en un 4%, mientras que la subida del precio de los bienes industriales no energéticos se atenuó al 1,1%, con medio punto porcentual menos que en febrero.
Al descontar el impacto de la energía, la tasa de inflación en la zona euro se sitúa en el 2,9%. Además, al excluir también los alimentos, el alcohol y el tabaco, la tasa subyacente disminuye al 2,9% desde el 3,1% registrado el mes anterior.