Esta semana va a ser más corta de lo habitual en Wall Street porque el lunes se celebra el Memorial Day en EEUU y será festivo. A lo largo de la semana se publicarán temas importantes como la tasa de desempleo de mayo que podría pasar del 3,6% al 3,5%, también se dará a conocer el PMI manufacturero y de servicios de mayo, el Libro beige de la Reserva Federal y también estaremos atentos a la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en un momento en el que la Casa Blanca podría aprobar una declaración de emergencia que permitiría al presidente Joe Biden liberar crudo de la reserva del país para paliar la escasez de suministro y contener los precios…

Respecto al desempleo los últimos datos muestran una economía con pleno empleo desde enero que se situó en el 4%, en febrero bajó al 3,8%, en marzo llegó al 3,6% y desde entonces se ha mantenido en ese porcentaje y hay posibilidades de que baje hasta el 3,5% lo cual es un buen indicador que muestra que la economía está en pleno empleo. Respecto a los PMI la lectura se mantiene en torno a 50 puntos lo cual es una buena lectura, con el PMI de servicios en 53 puntos, el PMI manufacturero aunque la proyección es que caiga puede terminar el 57,5 puntos. Respecto a la posibilidad de que se libere crudo es una medida que raramente se suele dar pero en un contexto tan endiablado algunos creen que puede ser necesario ya que el alza del precio de los transporte y la industria se puede trasladar a las familias a través de la presión inflacionista que hay en el país.

Wall Street tuvo mejores datos que la semana previa y entre ellos conocimos el PCE del mes de abril que cayó hasta el 6.3% que es el que usa la FED para calibrar las expectativas de inflación. 
Este índice de precios es conocido como el deflactor y esto se usa como un indicador de la subida de precios del consumo personal interno que se hace dentro de EEUU. Respecto a los datos mensuales tuvimos una lectura inicial de 5.2%. 

La semana pasada se produjo la reunión del FOMC y desde la FED se estima una subida del 0,5% en los tipos de interés. ¿sería la mejor opción? 
Es algo complicado el tema por el que está pasando EEUU. Los Bancos Centrales, tanto de Europa como de EEU, son prisioneros de la paradoja de que suban los tipos de interés y con ellas se agrave la situación. Ellos tienen el gran reto de controlar la inflación y lo hacen a través de una política monetaria restrictiva que implica subir tipos pero esa medida debe significar el no ahogamiento del crecimiento económico que se tiene. Por eso tienen un gran desafío los guardianes de la estabilidad monetaria porque se nota que cada vez ellos están menos cómodos. Subieron en 50 puntos y se cree que en junio y julio seguirán subiendo tipos, lo que dejaría los tipos entre 1.25-1.5%. Se ha descartado la subida de los puntos base respecto a la tasa de referencia de 0,75% pero es una medida que la FED tiene que tomar con  cautela porque puede ocasionar un problema. Si suben tipos, encarecen el coste del dinero y las familias y empresas se sentirán desincentivados a pedir créditos y eso retrae liquidez del mercado. Es una medida complicada de sobrellevar. 

Por otro lado, tenemos el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania que trae enormes efectos tanto directos como indirectos en EEUU y el mundo. Un efecto directo se ha visto con la balanza comercial pero eso también está afectando a que la inflación sea mayor, que el precio de los combustibles y cereales suba y por ende, el trabajo que hacen la FED y Bancos Centrales del mundo se complique más. 

Otros datos publicados muestran que los precios están afectando a los bolsillos de los estadounidenses como las ventas de viviendas nuevas en el país que cayeron un 16,6% en el país. 
Eso viene en caída desde el mes de enero. Una cifra alta que se explica por dos motivos: 1) por la inflación que hay en el mundo que supone que te quita poder adquisitivo y 2) la política restrictiva de la FED con la subida de tipos de forma agresiva está encareciendo el crédito e imposibilita que las personas se puedan endeudar para comprar una casa.