- Tras la reunión del FOMC, ¿ve probable la llegada del tapering para el primer semestre de 2022?
- Con los datos de inflación que hay todo el mercado está esperando a cuándo surge la primera pista de posible retirada de ayuda por parte de la Fed. Lo que ocurre es que creo que la Fed está mandando un mensaje continuado y muy pesado de que esto es transitorio. No cabe duda de que es real que hay un efecto base que va a desaparecer. Es decir, los meses de abril, mayo y junio de 2020 estábamos viendo los efectos del confinamiento, lo que provocó que tanto datos de crecimiento como de inflación se desplomase. En la comparativa año contra año, parte de lo que estamos viendo de la subida fuerte en términos de datos de crecimiento e inflación se debe al efecto base. Cuando desaparezca, empezaremos a ver dónde se sitúa la inflación real. Por un lado, está el efecto base y por otro el efecto real de las subidas de las materias primas, el coste de transporte de mercancías. Y tiene un componente estructural, aunque no del todo, porque también hay una destrucción del tejido empresarial que está produciendo que la oferta no esté en las mismas condiciones que la demanda, especialmente inflada por las políticas fiscales expansivas.
Es cierto que la transitoriedad está ahí. La pregunta es dónde se va a estabilizar la inflación después. Si es transitoria la lectura del 5% d general de EEUU, o del 3,8%. Pero si en la vuelta a un nivel más normal, se sitúa en el 3%, un 50% por encima del nivel que le es cómodo a la Fed, lo que haría completamente irresponsable mantener los estímulos a los niveles actuales. Ese va a ser un poco el juego que vamos a ir leyendo en 2021. Evaluando la transitoriedad, la paciencia que pueda tener la Fed. Lo razonable en este momento es pensar que de cara a este año, ni siquiera en el primer semestre de 2022, probablemente para finales del último trimestre, tendría sentido que la Fed levante el pie respecto al mercado inmobiliario. Hay mucha crítica sobre que está fomentando una burbuja sin precedentes. Entro de los 120.000 millones que compra todos los meses, 40.000 millones los destina a deuda hipotecaria. Parece que es innecesario y que está alentando las subidas de precios en la vivienda en EEUU. Creo que si tuviese que hacer una quiniela, diría que antes e que acabe este año vamos a ver una reducción de deuda hipotecaria, no así del resto. Será ya para 2022 cuando se empiece a plantear seriamente el proceso de desescalada de este estímulo.
Lo que pasa es que si el mercado reacciona negativamente ya hemos visto hasta que punto es flexible la Fed para volver a inflar los mercados tan pronto hay un problema, como ocurrió a finales de 2018.
- ¿Cuáles serán los principales catalizadores de las bolsas europeas para el resto del año?
- Creo que las bolsas europeas se van a encontrar con un entorno macroeconómico muy positivo. Probablemente en la segunda parte de este año vamos a ver como Europa va a tener un comportamiento de crecimientos muy similar al que hemos vivido en EEUU y China los últimos seis meses, lo que quiere decir que con la llegada de los paquetes fiscales que se aprobaron el verano pasado y la vuelta a las tasas de crecimiento, el entorno desde un punto de vista macro va a ser muy bueno. La pregunta es cuanto de ese entrono está ya cotizado en precios. Probablemente la gran mayoría. No hay que olvidar que el año pasado estábamos en una gran recesión, la peor del último siglo, e incluso este primer trimestre de 2021 hemos seguido en recesión. A pesar de eso, las bolsas estaban cotizando en máximos. Eso quiere decir que los inversores llevan trabajando con las expectativas de que nos recuperamos desde hace ya muchos meses y no cejan en ese optimismo. Con lo cual, entorno económico mucho mejor, la pregunta es cuánto está en precio. Vamos con la idea de que primero hace falta una corrección de entorno al 10%. Ahora, antes de que acabe el verano y probablemente esa corrección hay que comprarla para el movimiento que va a venir después, a lo largo de lo que resta el 2021, que debería ser eminentemente alcista.
- ¿Tocará el Ibex 35 los 10.000 puntos en el corto plazo?
- A corto plazo el Ibex 35 tiene una tendencia a la baja muy marcada y confirmada desde hace prácticamente 15 años. Empieza en 2006 esa línea de tendencia. Ha marcado máximos decrecientes a lo largo de todo este tiempo. Esa directriz o esa línea de tendencia básicamente marca una zona de resistencia en donde estamos ahora, entre los 9.200 y los 9.500 puntos. Creo que es más probable que desde la cota actual veamos un claro rechazo, esas correcciones del 10% o incluso un poco mayores. Probablemente esa es la que hay que comprar para ver si de cara a fin de año sí es capaz el Ibex 35 de romper los 9.500 e irse a cota más altas como los 10.000. No haría esa apuesta antes de verano, sino más bien para después.
- En cuanto a divisas, ¿cómo ve el comportamiento del dólar con respecto al euro en el largo plazo?
- Creo que va a haber una gran sorpresa desde el lado de que no va a haber gran direccionalidad. No hay mucha gente que está posicionada de forma agresiva frente al dólar. Al principio de este año habíamos alcanzado cotas históricas de posicionamiento corto contra el dólar. No veo que tenga sentido estar corto estructuralmente del dólar contra el euro. El principal motivo es que mientras que en Europa la inflación subyacente está en el 0,9% y va a subir, el BCE espera un 1,9%. En EEUU está al 3,8% y la general al 5%. Eso quiere decir que hay un diferencial enrome. La tasa de crecimiento en EEU es mejor que la de Europa. Ese gap se va a cerrar, pero cuando hablo de que EEUU está creciendo fuerte es que EEUU tiene un nivel superior al que la Fed le gustaría tener a largo plazo en términos de inflación, lo que intento decir es que la Fed está mucho más cerca de hacer un tapering de lo que lo está el BCE. En base a eso, cotizaciones de 1,22/1,25 son cotizaciones donde el euro está muy caro frente al dólar con ese diferencial de crecimiento de inflación de las dos regiones. No digo que no podamos ver ataques a la zona de 1,245. Pero el riesgo principal es que tengamos movimientos hacia cotas más bajas. El primer soporte en 1,195/1,20. Si se llegara a perder podríamos baja r a cotas de 1,16/1,17.