Pese a que históricamente la Bolsa de Londres ha sido el referente como mercado bursátil en el territorio europeo, la realidad actual es bien distinta y acumula una etapa de declive y desplome que le lleva a una situación insólita. Con los datos en la mano, se puede comprobar que ha perdido el 25% de las empresas que cotizan en ella durante la última década.
La Bolsa de Londres ha visto cómo las mayores reservas de efectivo de los inversores se trasladaban al centro tecnológico de Nueva York. Las previsiones de futuro no son nada halagüeñas, pues se espera que en 2024 el aumento de las adquisiciones y la languidez de las nuevas salidas a Bolsa provoquen un desplome aún mayor.
Durante el último año, su rendimiento ha ido bajando paulatinamente. Sin ir más lejos, a finales de noviembre, cerró su jornada del día 27 con una caída del 0,37%, todo ello como consecuencia de los malos desempeños de los sectores farmacéuticos y financieros.
El valor del mercado londinense en dólares ha caído en un 14% en la última década, viéndose la Bolsa de Londres superada por la de París, que ahora ostenta el título de la más poderosa de Europa. De hecho, le quitó el primer puesto con los activos de mayor cotización del mercado; alrededor de 2,8 billones de dólares frente a los 2,3 billones de dólares de la Bolsa de Londres.
De igual modo, la Bolsa de Ámsterdam es la que más dinero mueve en la actualidad de entre todas las plazas bursátiles europeas.
¿A qué se deben la caída de sus acciones?
La Bolsa de Londres continúa cayendo y los inversionistas buscan en el oro y en los Bonos del Tesoro de EEUU un activo férreo para subsistir. La caída del valor de la libra, el Brexit o el rendimiento productivo y comercial de los fabricantes franceses de artículos de lujo (como LVMH), son algunos de los factores que influyen en esta crítica situación. La subida de la inflación y de los tipos de interés no ayuda a la situación financiera e incluso inducen a un temor generalizado hacia una recesión inminente.
El desafortunado proyecto de presupuesto con altos recortes fiscales de la ex ministra Liz Truss acabó por hundir a la libra esterlina a su valor más bajo frente al dólar estadounidense, sumergiendo a la economía en un caos absoluto. El derrumbe del mercado británico fue justo tres semanas después de la llegada de Truss al poder, perdiendo el mercado de acciones y bonos del Reino Unido cerca de 500.000 millones de libras esterlinas en valor combinado.
El Brexit ha reducido considerablemente la producción potencial de la economía, erosionando la inversión empresarial. De hecho, su economía es peor a la del peor desempeño de las economías del G7, siendo la única que no ha recuperado todavía los niveles previos a la crisis sanitaria.
De hecho, cuando el Reino Unido votó a favor de abandonar la UE, las acciones valían 1,5 billones de dólares más que las de Francia. Las empresas de mediana capitalización de Reino Unido se han visto afectadas por las elevadas previsiones negativas del país, afectado más por la inflación que otros puntos del viejo continente.
Así pues, las pequeñas empresas enfocadas en el consumidor se han visto afectadas por la recesión económica, agravada por la crisis energética, la alta inflación y la incipiente volatilidad del mercado.
Los accionistas e inversionistas de la Bolsa de Londres, así como del resto de Europa, están adoptando una postura conservacionista, migrando hacia otros mercados para resguardarse de la inflación.
Sin bien es cierto que el Oro cotizó su máximo en seis meses (2.017,82 dólares la onza), y los bonos estadounidenses a diez años subieron al 4,4% (un punto de diferencia con respecto a la última cotización).
Un problema que se extiende
La situación de decadencia de la Bolsa de Londres también se hace extensible a la Bolsa de EEUU, que de contar con 6.000 entidades a mediados de la década de 1990, pasó a registrar menos de la mitad en octubre de 2021.
¿Qué futuro le aguarda a la Bolsa de Londres?
Algunas empresas experimentaron un alza en el valor de sus acciones, como la Inmobiliaria Rightmove, que subió un 4,79%, la empresa Howden Joinery Group (con un 1,89%) o la minera Frenillo (con un 4,31%).
De igual modo, la libra esterlina se revalorizó en un moderado porcentaje del 0,13% frente al euro (un valor de 1,153 euros) y un 0,09% frente al dólar (1,261 dólares por libra).