La advertencia del regulador farmacéutico de Estados Unidos, la Food and Drug Administration o FDA por sus siglas en inglés, sobre la realización de un procedimiento quirúrgico común en las mujeres ha despertado la polémica en el sector de la atención ginecológica de Estados Unidos, según informa The Wall Street Journal.
La FDA sorprendía el mes pasado a los ginecólogos al advertir sobre el uso de un dispositivo llamado morcelador laparoscópico asistido, ya que puede propagar un cáncer oculto peligroso. Esta herramienta se emplea en cirugías mínimamente invasivas para cortar y extirpar tumores uterinos denominados fibromas, y a veces como parte de una histerectomía.
Aunque no se dispone de las cifras concretas de médicos que han seguido esta advertencia no vinculante, que la FDA planea volver a hacer en una audiencia este verano, lo cierto es que decenas de entrevistas muestran que la comunidad médica se encuentra dividida. Muchos profesionales consideran que el regulador se ha extralimitado y afirman que el riesgo es muy pequeño.
Mientras, el mayor fabricante de este dispositivo, Johnson & Johnson, ha suspendido las ventas globales, aunque continúa destacando la efectividad y seguridad del mismo. La compañía recuerda que las instrucciones del aparato siempre han advertido a los medicos sobre la posible propagación de tejido maligno o sospechoso.
S.C.